BARCELONA 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
El DKV Joventut de Badalona juega mañana en Ucrania ante el Azovmash un partido que puede resultar determinante para su futuro en la Eurocup de la FIBA, dado que ambos equipos están igualados, junto al Khimki ruso, a falta de otros dos partidos de la segunda fase.
En la ciudad de Mariupol, la Penya espera dar un paso hacia los cuartos de final del torneo en un encuentro en el que Aíto García Reneses cuenta con la baja de Aloisius Anagonye, lesionado la semana pasada y que ya no pudo jugar el último partido de la ACB.
El Joventut encara el partido después de ganar en la pista del Leche Río Breogán (74-76), donde se reencontró con la victoria y retomó su buena racha tras haber perdido con claridad (95-66) el encuentro de la pasada jornada europea, en Rusia ante el Khimki.
En la expedición desplazada a Ucrania, Aíto ha incluido a los jóvenes Henk Norel y Pau Ribas y también cabe destacar que ha viajado el base Marcelinho Huertas, aquejado de un esguince de tobillo desde hace dos semanas y que también viajó a Lugo, aunque no jugó.
El técnico del Joventut manifestó antes de emprender el viaje que el Azovmash es un rival "bastante potente", pero que su "mayor preocupación" en este momento es el estado físico de varios jugadores "tocados", como Lubos Barton, Elmer Bennett y Robert Archibald.
"La segunda preocupación que tengo es todo el desgaste que reparan estos viajes tan largos, y todavía más cuando te coincide que viajas a Rusia, a Lugo y a Ucrania. Ahora estoy más preocupado por esto que por otras cosas", explicó Aíto García Reneses.
Elmer Benett, por su parte, señaló que será "un partido muy difícil" y recordó que el DKV "sufrió mucho" para ganar al Azovmash en Badalona (91-73), al tiempo que aludió a los últimos partidos, en casa ante el Privatbank EKA AEL chipriota y el Khimki.
"Ganar es un paso para clasificarnos pero tenemos que pensar que nos quedan dos partidos importantísimos en casa, con mucha presión para ganar. Hay que estar muy concentrados", concluyó el veterano base estadounidense, que confía en acabar "haciendo un buen trabajo".