Los malagueños se confiaron y necesitaron de la prórroga
MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Unicaja de Málaga sumó una nueva victoria ante el Partizán de Belgrado (83-79), después de una prórroga consecuencia de su relajación en el segundo acto, que le permite afianzar el liderato de su grupo y asegurarse ya la segunda plaza a falta de una jornada, mientras que el Real Madrid, que trataba de mejorar sus registros, encajó la sexta derrota de la competición ante el Montepaschi Siena.
En el pabellón Martín Carpena, el Unicaja continuó con su gran marcha y mantuvo su liderato, aunque para ello tuvo que sufrir más de la cuenta ante el colista Partizán de Belgrado que aprovechó cierta relajación de los de Sergio Scariolo.
El equipo malagueño trabajó a su nivel habitual en los tres primeros cuartos, sobre todo en el inicial donde dejó a su rival en unos pobres siete puntos que le sirvieron para cimentar una cómoda renta (18-7), que supo aumentar en los siguientes diez minutos (38-24).
Sin embargo, con el paso de los minutos, el Unicaja empezó a caer víctima del juego del rival, que dominó el rebote con un impresionante Dejan Milojevic (17, 8 en ataque), y aunque afrontó el tramo final con una jugosa ventaja (59-49), encajó un parcial de 0-13 y vio como el Partizán daba la vuelta al marcador (61-66).
Los de Belgrado tuvieron el partido en su mano, pero eligieron defender en vez de hacer falta y Pepe Sánchez empató con un triple (70-70). Milojevic falló la última posesión y en la prórroga dos triples seguidos de Garbajosa, 'desaparecido' hasta entonces, acabaron por decidir la balanza hacia el bando local.
EL EQUIPO DE MALJKOVIC DESAPROVECHA LAS JUGADAS FINALES.
El Real Madrid, que jugaba sin el lesionado Bullock, volvió a dar muestras de su irregularidad y cedió ante el Montepaschi (77-74) en un partido en el que siempre estuvo abajo en el marcador, pero cuya victoria acarició en el tramo final donde los errores de Rakocevic y Hervelle supusieron un obstáculo insalvable.
Al equipo de Maljkovic le costó entrar en juego y sólo la aportación de Felipe Reyes le posibilitó seguir en el partido al término del primer cuarto (25-18). Los italianos, que se jugaban parte de su clasificación, jugaron con mayor intensidad y contaron además con la inestimable aportación de Kaukenas, que se marchó al descanso con 23 puntos en su casillero.
Los blancos seguían la estela del Montepaschi con los puntos de Reyes y Tomas, pero su desventaja era cada vez mayor, hasta situarse a 15 puntos, sin noticias además de Rakocevic, encargado de liderar la ofensiva merengue sin la presencia de Bullock.
Con una desventaja de doce inició el Madrid el periodo final, pero Rakocevic regresó a la cancha y anotó ocho puntos para restar la diferencia y situarse a sólo dos puntos. El escolta serbio dispuso además de un lanzamiento que hubiera situado en ventaja a los blancos, pero erró, al igual que hiciera más tarde Hervelle desde el tiro libre, y se esfumaron las opciones del equipo de Maljkovic, que verdaderamente nunca creyó en el triunfo.
