VITORIA 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Caja Laboral, Dusko Ivanovic, aseguró que no le había "gustado nada" su equipo, tras conseguir el triunfo 'in extremis' ante el Granada, aunque reconoció que había sido "un partido difícil" en el que "tuvieron fé hasta el final".
"Empezamos sin ritmo, sosos y no estábamos finos. No me gustó nada mi equipo. Es algo más o menos normal después de tantos partidos acumulados", razonó, aunque también supo sacar la parte positiva. "Lo que sí me gustó es que tuvimos fe hasta el final para ganar", recalcó.
El cansancio provocado por los choques de Euroliga ante el CSKA Moscú se tradujo en numerosas pérdidas de balón en la primera mitad: "No podemos salir así a los partidos. Si en los primeros veinte minutos perdemos 13 balones es muy difícil, aunque después de dos partidos tan duros es algo normal jugar así", aseguró.
Stanko Barac no participó en todo el encuentro, algo que Ivanovic achacó a una lesión en la espalda. "No pudimos contar con él porque tenía un problema de espalda. El martes le haremos pruebas y veremos cómo evoluciona", manifestó.
Por último, el montenegrino destacó al Granada como "uno de los equipos que mejor juega, a un altísimo nivel ya que ganó en Sevilla y a punto estuvo de ganar al Barcelona", concluyó.