BARCELONA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario técnico del FC Barcelona, Txiki Begiristain, y el entrenador Frank Rijkaard se reunirán mañana para decidir el futuro del delantero Samuel Eto'o y la actuación del club respecto al jugador camerunés después de sus polémicas declaraciones y de su negativa a disputar los últimos minutos del partido ante el Racing.
El presidente del Barcelona, Joan Laporta, que ayer se reunió con Eto'o y hoy justificó la reacción que tuvo el pasado domingo, antes de que el jugador estallase ante los periodistas, no quiso hacer declaraciones esta tarde tras asistir a un acto y, en principio, deja la resolución del conflicto en manos de Begiristain y Rijkaard.
El club barcelonista, de momento, no se pronuncia sobre la posible sanción al jugador por sus declaraciones, en que criticó la actuación de su entrenador por haber revelado públicamente que no quiso entrar a jugar, llegando incluso a decir que "es de mala persona los que salen en una rueda de prensa a decir que Eto'o se ha negado a jugar".
La posibilidad de tomar medidas disciplinarias queda pendiente de la reunión entre Begiristain y Rijkaard, que, en principio, se celebrará a primera hora de la tarde, después de que Eto'o, por la mañana, se reencuentre con el técnico holandés y con el resto de jugadores y miembros de la plantilla en el entrenamiento.
La directiva del Barcelona considera que el asunto compete a los responsables técnicos del club porque continúa perteneciendo al ámbito del vestuario y que, por ello, debe resolverse en el seno del propio vestuario, según explicó el director de comunicación del club, Jordi Badia, que desde este mes asume funciones de portavoz del club.
El presidente Joan Laporta declinó realizar manifestaciones sobre las palabras de Eto'o tras asistir esta tarde al acto de presentación del calendario de eventos deportivos que se celebran este año en Catalunya, una iniciativa de la Unió de Federacions Esportives de Catalunya que cuenta con el apoyo de la Generalitat.
Por la mañana, Laporta justificó la reacción de Eto'o de negarse a jugar los cinco últimos minutos del partido ante el Racing porque, según dijo, el jugador fue "prudente" y no quiso salir a jugar por entender que no había tenido el tiempo "suficiente" de calentamiento, a fin de evitar una recaída en su lesión de rodilla.
Laporta mantuvo que Eto'o "no se negó a jugar" y consideró que el comportamiento fue "totalmente comprensible" dadas sus ganas de jugar tras "144 días" lesionado. Además, confió en la "maestría" de Rijkaard en estas situaciones para que todo quede "aclarado". "Seguro que Rijkaard lo solucionará como siempre", afirmó.
