BARCELONA, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del FC Barcelona, Frank Rijkaard, se ve capacitado para conseguir éxitos con el Barça esta temporada y pidió hoy más sacrificio a sus jugadores y más responsabilidad a las figuras del equipo, principalmente a los delanteros, a los que advirtió de posibles cambios en el equipo titular en los próximos partidos.
Rijkaard, que vuelve a ser cuestionado desde diversos sectores después de la derrota en Getafe (2-0), se ve con moral para sacar la situación adelante y asegura ser el primero en hacer "autocrítica", por lo que se plantea introducir novedades en el equipo titular y también cambiar algunos "detalles" en su esquema de juego habitual.
El holandés, que dijo estar "convencido" de poder superar este momento, exigió más sacrificio a sus jugadores y apuntó, sobre todo, a la delantera que forman Ronaldinho, Henry y Messi, aunque sin citarlos, al señalar que falta movilidad en ataque y que también deben ser los primeros en defender cuando el equipo pierde el balón.
En su opinión, hay jugadores que han estado "por debajo de sus posibilidades" fuera de casa y que también es una cuestión de actitud, porque "no todos los jugadores trabajan igual cuando el equipo no tiene el balón". Además, instó a las figuras a asumir su responsabilidad y advirtió de posibles cambios en próximas fechas.
"Las figuras deben coger al equipo con sus manos, pero cuando no funciona, lo único que puedo hacer es mirarme al espejo y pensar si puedo cambiar algo", señaló Rijkaard, que entiende que debe "actuar con cuidado", pero a la vez "cambiar algo para lograr una dinámica de sacrificio y de trabajo, y después ya habrá espacio para el talento".
El entrenador barcelonista considera que el talento "sólo aparece cuando el equipo está metido y todos trabajan igual", y reconoció la posibilidad de dejar en el banquillo a alguna de las figuras del equipo. "Siempre he actuado con paciencia y esperando que algo podía cambiar, pero llega un momento en que dices 'hasta aquí y no más'", advirtió.
Así, comentó que "cada uno tiene sus límites" y que llega un momento en que hay que cambiar para "lograr que todos los jugadores vayan en la misma dirección". Igualmente, no cree que sea un drama sentar en el banquillo a alguna de las figuras del equipo, sino que "es un drama no lograr algo con un gran club como el Barcelona".
"No hablo únicamente de un 'crack', sino del equipo, y de vez en cuando hay que escoger, y esto puede variar", avisó, asegurando que llegar a este momento "no es tan problemático", si bien también reconoció que también debe pensar en las consecuencias de apostar de inicio por los jóvenes, en alusión a los delanteros Bojan y Giovani.
"Llegará el momento en que tenga que decir que los jóvenes jueguen desde el inicio, pero no es lo que quería porque los jóvenes se merecen entrar en un partido ya resuelto para adaptarse poco a poco. Y tampoco podemos pensar que los jóvenes van a solucionar los problemas de repente", continuó Rijkaard en su comparecencia ante la prensa.
"SACRIFICIO Y SENTIDO COMÚN PARA GANAR".
El técnico azulgrana también manifestó que no siente envidia del espíritu que muestran los jugadores del Real Madrid para ganar sus partidos, porque "gana quien lo merece", aunque apuntó que "a menudo es una energía invisible la que te ayuda a ganar cosas" y apeló de nuevo al "sacrificio" y al "sentido común" para superar los encuentros.
Además, insistió en el trabajo como única manera de resolver algunos partidos. "Hay dos formas de jugar bien; una es tener la forma del día, cuando todo te sale bien, y otra, aún más importante, es salir al campo a hacer todo lo que tienes que hacer para ayudar al equipo. Y en esto hay que corregir porque no puede ser", afirmó.
El entrenador del Barcelona también cree que hay que mantener la prudencia y cree que es "demasiado pronto" para plantearse si era necesario realizar más cambios en el equipo el pasado verano. "Aún tenemos todo en nuestras manos y creo que, con esta plantilla, todavía podemos lograr algo bueno", declaró.
Igualmente, evitó juzgar la actitud de Ronaldinho y argumentó que quejarse del equipo o de los jugadores en particular, sería para él como quejarse de sí mismo, pues asume su responsabilidad como técnico, "y por eso --dijo Rijkaard-- debemos trabajar para buscar una solución y yo soy quien elige a los jugadores".
Antes de viajar a Alcoy, donde el Barcelona juega mañana el partido de ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, a Rijkaard sólo le hicieron una pregunta sobre la cita con el Alcoyano y aprovechó para destacar que el rival tiene las virtudes que él reclama al Barça, "el trabajo, el sacrificio y el sentido común".
"El pasado nos enseña que estos partidos en campos pequeños siempre son complicados y no será un partido fácil, por eso debemos jugar con muchas ganas para lograr un buen resultado, que es lo que necesitamos", concluyó Rijkaard.
