BERLÍN, 8 Abr. (EP/Reuters) -
El club alemán del St. Pauli tendrá que jugar a puerta cerrada su partido ante el Werder Bremen, después de que el último encuentro en su estadio fuera suspendido tras el impacto sufrido por un juez de línea, que fue alcanzado por un vaso de plástico, lanzado desde la grada, según ha anunciado la Federación Alemana de Fútbol (DFB).
El suceso que desencadenó este castigo se produjo en el partido del pasado viernes ante el Schalke 04, en el que los locales se quedaron con nueve jugadores cuando perdían por 2-0.
En el minuto 87 del choque, un aficionado arrojó un vaso de cerveza desde la grada que impactó en la nuca de uno de los asistentes, por lo que el duelo fue suspendido de forma inmediata.
El comité del organismo rector del fútbol alemán ha confirmado que la sanción se hará efectiva en el partido que el conjunto de Hamburgo debe disputar el próximo 23 de abril en el Millenrtor Staduim ante el Werder Bremen.
A pesar de que el club de Hamburgo había pedido que sólo se le impusiera una multa económica, el tribunal disciplinario confirmó este viernes la sanción.
