El Real Madrid resuelve en San Mamés con un acierto puntual y el Barça sentencia en Zamora

Europa Press Deportes
Actualizado: miércoles, 4 enero 2006 1:47

MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

Una gran jugada del Real Madrid, trenzada entre Guti y Robinho y que resolvió Beckham, lo mejor y casi único de los blancos en la segunda mitad, les sirvió para variar el rumbo con el que acabó el pasado año y partir de Bilbao (0-1) con ventaja en la eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey, ronda que parece ya pasado para el FC Barcelona, capaz de resolver el partido ante el modesto Zamora en los minutos finales (1-3).

El ejercicio futbolístico del nuevo año parecía iniciarse con los mismos síntomas del pasado, aunque el escenario fuera la Copa del Rey, es decir, un FC Barcelona solvente y victorioso y un Real Madrid dubitativo y sin juego, pero al final se modificó producto del poder de resolución de los merengues.

El FC Barcelona superó con nota el compromiso 'trampa' ante un equipo de inferior categoría mientras que el estreno copero de López Caro en San Mamés se resolvió a favor de sus intereses fruto de un acierto puntual, aunque las carencias del equipo, que sufrió más de la cuenta, fueron las mismas de siempre.

El único gran momento de los blancos en el segundo acto, un sensacional pase de Guti que dio sentido Robinho, el más activo de los suyos, sirvió para decantar un partido en el que el Athletic, también sin un gran juego, sí había ofrecido más instantes ofensivos. Aduriz y Etxeberría disfrutaron de claras oportunidades, aunque Diego López, una de las novedades en el once madridista, demostró su capacidad para defender la portería del Madrid.

El técnico blanco recurrió a algunos de los menos habituales, como Raúl Bravo en el flanco izquierdo, Mejía en el eje de la zaga o Soldado en la punta de ataque, ante la ausencia de los lesionados Raúl y Ronaldo.

Pero ni la ilusión de la camada de jóvenes a los que López Caro pretende entregar el testigo sirvió para cambiar la versión del equipo blanco, muy pobre en ataque y siempre recibiendo los achuchones del Athletic.

BUEN ROBINHO.

Al Real Madrid en la primera mitad al menos le insufló ánimos Robinho. Varias de sus galopadas fueron lo más destacado del equipo, en el que no pudo debutar Cicinho, y que estuvo carente de capacidad para generar fútbol y soliviantar los ánimos de su hinchada.

Más brio y energía mostró el Athletic, aunque Clemente formó un equipo inédito, con la presencia de Julen Guerrero de inicio y del ariete Aduriz, fichado del Valladolid en el mercado de invierno. El propio Aduriz protagonizó la primera gran ocasión de los leones, con un disparo que despejó Diego López. Superada la media hora, Etxeberría también acarició el tanto a la salida de un córner, pero el Madrid se salvó.

Tras la reanudación, el Athletic se quedó sólo en sus intentos ofensivos porque el equipo blanco perdió de vista la portería de Aranzubia. No obstante todos los intentos locales se fueron al limbo y en cambio una gran jugada de los visitantes terminó en un gol que puede ser decisivo en la eliminatoria y sobre el que el equipo de López Caro pretende cimentar su despegue.

EL FC BARCELONA ENCARRILA SU PASE A CUARTOS.

El FC Barcelona encarriló su clasificación para cuartos con victoria en Zamora (1-3), en un partido que los de Frank Rijkaard sentenciaron en los minutos finales tras comenzar perdiendo.

El conjunto culé se presentó en el Ruta de la Plata con la ausencia de sus estrellas principales, y tuvo que recurrir a algunos de sus secundarios, como Santi Ezquerro o Giovanni van Bronkhorst para dar la vuelta a un choque que se complicó en el minuto 5, cuando Saco quebró a Belletti y a Jorquera, hoy titular, para adelantar al equipo castellano.

Pese al gol, el Barcelona no dio síntomas de nerviosismo en ninguna fase del partido, sabedor de que la Copa permite a los 'grandes' disfrutar de un partido de vuelta para resolver compromisos incómodos como el de Zamora. Los de Rijkaard, sin embargo, quisieron resolver en este primer envite y cercaron rápido la meta de Vílches, que acumuló un puñado de buenas intervenciones.

Ezquerro, Iniesta y Giuly no definieron durante los primeros minutos, y tuvo que ser Gio quien pusiese las tablas en el marcador diez minutos antes del descanso en combinación con el ex jugador del Athletic de Bilbao. Justa recompensa para los merecimientos de unos y otros.

En la segunda parte, el Barcelona desequilibró el partido a base de insistencia. Pudo resolver antes el partido, pero debió esperar al minuto 80 para respirar con total tranquilidad. Fue Rafa Márquez quien transformó una falta para acabar con las ilusiones de la bulliciosa afición zamorana.

En los instantes finales, Giuly remató la faena al culminar una jugada de Sylvinho. Con este resultado, la eliminatoria prácticamente resuelta y desgaste mínimo para un Barcelona que tiró de la solvencia de sus suplentes para resolver un partido con trampa.

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