MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La selección española masculina de rugby a siete ha finalizado el torneo de Lyon, segunda de las tres series que configuran el campeonato de Europa, en la segunda posición al perder en la final (20-7) frente a Francia, mientras que 'Las Leonas' terminaron en cuarta posición tras perder en la final de consolación frente a Inglaterra (12-7) en Kazán, primera de las dos series que configuran el campeonato de Europa.
'Los Leones' se posicionan gracias a la final de Lyon en el segundo puesto de Europa con 34 puntos, a seis de los galos y a falta de la prueba de Exeter. El ganador del Campeonato de Europa tendrá billete directo para los Juego Olímpicos y el segundo, puesto que actualmente ocupa España, se clasifica directamente para el preolimpico mundial.
Los hombres de Alberto Socias derrotaron en el cruce a Inglaterra (26-5) e hicieron lo mismo contra la vertical Bélgica en semifinales (24-5) al sobreponerse a una primera parte complicada que arrancó con un ensayo en contra.
Frente a la selección más en forma de Europa en la actualidad, también anfitriona del torneo, la selección española masculina dominó durante una parte entera al 'Gallo' y se dejó llevar en el segundo periodo. Francia se hizo con el oval e impuso su físico y su ritmo para anotar tres ensayos con los que dejó el marcador en el 20-7 final.
LAS CHICAS, CUARTAS EN KAZÁN
En otro orden las cosas, la selección española femenina de Seven terminó en la cuarta posición en Kazán tras perder en la final de consolación frente a Inglaterra y se quedan como cuartas de Europa por detrás del 7 de la Rosa, Francia y, la campeona en el torneo Rusia, una posición que le obligaría a luchar durante julio en el torneo de Lisboa para quedar entre las tres primeras para ir a ese preolímpico mundial.
'Las Leonas' se impusieron con contundencia a Irlanda y a Ucrania en la primera jornada y perdieron por la mínima frente a Francia. Frente a Holanda, España vivió un partido duro e intenso que se acabó llevando (14-21) para asegurar la cuarta plaza europea.
En semifinales, cayeron a manos de Rusia, que impuso su juego y demostró que éste era su torneo desde el primer minuto. El 36-7 en contra condenó a España a jugar por la tercera plaza frente a Inglaterra.
