MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El regatista español Iker Martínez, patrón del 'MAPFRE', reconoció "una sensación de tristeza" por haber llegado al final de la Volvo Ocean Race, la vuelta al mundo a vela con escalas, y subrayó que son "mucho mejor equipo" que cuando terminaron la primera etapa en Ciudad del Cabo.
"El final ha sido excitante, como todos los finales, y por muchas razones. Primero, porque cuando se acaba hay una sensación de tristeza porque se acaba; pero a la vez es una sensación de alegría porque cuando empiezas un proyecto de este tipo lo haces queriendo acabar y llegar aquí con el barco y con toda la tripulación ya es un éxito", comentó Martínez al término de la etapa.
Además, el guipuzcoano cree que ahora sin "mucho más competitivos y mucho mejor equipo que cuando acabó la primera etapa". "Somos mejor equipo y eso nos tiene que hacer estar muy contentos", sentenció al respecto.
Sobre el final de la etapa, lo califico como "un poco como la mano de Dios de Maradona" y donde hubo que "pelear hasta el final". "Vayan bien o mal las cosas, nosotros nunca vamos a dar algo por perdido hasta que no se haya acabado", advirtió.
"Después de tantas millas hemos pasado al 'Dongfeng' en la última milla porque ha calmado el viento y hemos tenido un golpe de fortuna, y además lo hemos sabido aprovechar. El volver a subirnos al podio nos hace estar un poco más contentos", añadió al respecto.
Martínez no quiere relajaciones todavía porque les queda una costera. "Ahora hay que pensar el futuro, que es el sábado que viene. Hay que pelear por ese cuarto puesto en la general con 'Alvimedica', así que a seguir concentrados y a seguir para adelante", apuntó.
Por su parte, Antonio Cuervas-Mons afirmó que subir al podio era "siempre el objetivo del equipo". "Pero creo que este tipo de llegadas no muestran lo que realmente es una vuelta al mundo, cuando al final te estás jugando el podio de la regata en una racha que hay en una ría con 50 ó 100 metros de ancho", confesó.
