KINGSCLIFF (AUSTRALIA), 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
Después de dos años de ausencia, el Rally de Australia vuelve al Campeonato del Mundo en una prueba totalmente renovada en la que el francés Sebastien Loeb (Citroën) intentará reencontrarse con la victoria para dar caza al nuevo líder del Mundial, el finlandés Mikko Hirvonen (Ford), que amenaza seriamente con arrebatar al galo su sexto entorchado consecutivo.
Tras disputarse durante 19 años con base en la ciudad de Perth, la vigésima edición de la cita 'aussie' se presenta en su regreso con una nueva imagen y una nueva ubicación, cambiando la costa oeste australiana por la este y estableciéndose en la región de Nueva Gales del Sur.
El entorno, paisaje y condiciones de pista de las costas este y oeste del país oceánico son un mundo aparte, por lo que, como ya ocurriera en el Rally de Polonia, el de Australia representará un gran salto a lo desconocido tanto para los equipos como para los pilotos, justo en un momento clave en el que, por lo apretado de la clasificación, hay mucho en juego en la lucha por el título de pilotos y constructores.
Avalado por un 'hat-trick' de triunfos consecutivos en Grecia, Polonia y Finlandia, Hirvonen llega a Australia como el nuevo líder del Mundial, con tres puntos de ventaja, tantos como carreras quedan para concluir la temporada, sobre Loeb, que con las cinco victorias con las que abrió el curso, todavía no sabe cómo se le ha podido complicar tanto lo que parecía un camino de rosas hacia su sexta corona consecutiva.
En estos tres capítulos restantes para la conclusión, ambos se jugarán, por tanto, el título, sabedores de que cualquier error de aquí al final puede resultar fatal. De momento, la prueba 'aussie', pese a que en la última edición, la de 2006, el triunfo fue para el finlandés, parte sin un favorito claro debido al desconocido trazado que deberán afrontar los dos pilotos que dirimen este mano a mano por el primer cajón del podio final.
SORDO BUSCA CONSOLIDAR SU TERCERA PLAZA.
Tan apretado como la lucha por el título de pilotos se encuentra el pulso por la victoria en el Mundial de constructores, existiendo ahora mismo una escasa ventaja de 14 puntos favorable a Citröen. En esa pelea reclaman también su cuota de protagonismo el español Dani Sordo (Citröen) y el finlandés Jari-Matti Latvala (Ford), que se disputan, además, la tercera plaza de la clasificación final.
El cántabro, con cuatro podios a los largo de la campaña, cuenta con una ventaja de 13 puntos que quiere consolidar de aquí al final, donde de paso buscará su primera victoria, algo que ya consiguió su rival finlandés en el pasado Rally de Cerdeña. Por su parte, el noruego Henning Solberg (Ford), quinto, intentará acercarse a la cabeza y distanciarse de su hermano Petter, que no participará en esta prueba y que ultima su reaparición para las citas de España y Gran Bretaña al volante de un Citröen C4 o de un Ford Focus.
En total, el Rally de Australia constará de 35 especiales cronometradas, más que en cualquier otra prueba del campeonato este año, y constará de la menor longitud media por tramo. Entre ellas, el jueves, viernes y sábado por la noche se celebrará una superespecial de asfalto en Murwillumbah que tendrá un formato inusual, ya que se disputará en grupos de tres coches que saldrán en intervalos de 15 segundos cada uno.
