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MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
El tenista español Nicolás Almagro superó su debut este martes en La Caja Mágica después de imponerse en tres sets (6-3, 6-7(9), 7-6(4)) al kazajo Andrey Golubev en la primera ronda del Mutua Madrid Open 2014, cuarto Masters 1.000 de la temporada, y tendrá ahora un duelo de alturas ante el escocés Andy Murray por un puesto en octavos de final.
El murciano, que viene de destronar a Rafa Nadal en el Conde de Godó con su primera victoria ante el mallorquín en once duelos directos, comenzó con fuerza y contundencia en la Arantxa Sánchez Vicario. Sin embargo, su rival fue de menos a más y el tenista de la 'Armada' tuvo que remar hasta el final para cerrar con victoria la primera ronda, tras dos horas y media y 11 bolas de partido.
Almagro dio alas a un rival que parecía tocado y con pocas opciones. El murciano, con una derecha contundente y un buen servicio, logró hacerse con un cómodo primer set con un único 'break', en el cuarto juego, y aprovechando los 15 errores no forzados de su rival. Sin embargo, tras un primer parcial sin grandes sobresaltos, el duelo subió de nivel y las tornas cambiaron.
El tenista murciano, semifinalista en Madrid en 2010, pasó a cometer errores y olvidó la firmeza del inicio. Golubev, por su parte, había entrado en calor y se aferró a la arcilla de la Arantxa Sánchez Vicario. Primero, el tenista de la 'Armada' salvó la única bola de 'break' en el segundo set para mandar el parcial a la 'muerte súbita' y ahí, Golubev sacó su mejor tenis para salvar las primeras bolas de partido del español y así llegar al tercer parcial.
Ahí, de nuevo Almagro recuperó su agresividad y pilló sin la tensión necesaria al kazajo para lograr un 'break' temprano. Sin embargo, con 5-3 y 5-4, el murciano se quedaba de nuevo sin convertir nuevas opciones de llevarse el partido, ante un Golubev que por momentos soltaba raquetazos de 'Top 10'. Así, el set quedó para un segundo 'tie-break' en el que el español no perdió la cabeza y siguió remando hasta tumbar la resistencia rival.
Tras el encuentro, el tenista murciano confesó sentirse bien físicamente a pesar de las molestias con las que terminó en Barcelona hace dos semanas donde cayó en semifinales ante el colombiano Santiago Giraldo. Además, sobre su próximo rival, Andy Murray, se congratuló como mal menor de que el enfrentamiento ante el número ocho del mundo sea en tierra batida, superficie en la que logró su única victoria sobre el británico, en cuatro enfrentamientos, en el Roland Garros de 2008.
