MADRID 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 'All England Club' reúne a partir de este lunes a los mejores tenistas del mundo en busca del tercer 'grande' de la temporada, coto particular de Roger Federer, quien reservó su físico una vez más para el que sería su noveno título en Londres, mientras que el español Rafa Nadal desafía de nuevo al suizo en el décimo aniversario de su mítica y primera victoria en la hierba inglesa.
El Circuito cambia de tercio y ahora le toca al de Basilea jugar sus cartas. El 20 veces campeón de 'Grand Slam' salta a su jardín, como igual se sentía en casa hace menos de un mes Nadal, en la tierra de París. Los números ahora acompañan a un Federer que juega por vigésima vez seguida en Wimbledon, tiene un récord de ocho títulos --cinco seguidos de 2003 a 2007-- y un 91-11 de victorias-derrotas.
El suizo repite la estrategia de 2017, saltarse los torneos de tierra y preparar el asalto a la hierba londinense en Stuttgart y Halle, donde sacó un título y una final perdida, la que le quitó el número uno pero no esa condición de cabeza de serie en Wimbledon. Ahora, el mejor tenista de la historia se dispone a estirar esa segunda juventud inmensa que sacó de su raqueta el año pasado y que inició 2018 ganando el Abierto de Australia.
Al todos contra Federer se alista al frente Nadal. Al tenista español le recuerdan en las jornadas previas esa final de 2008, considerada por muchos la mayor oda al tenis, que se apuntó el balear ante el suizo (6-4, 6-4, 6-7(5), 6-7(8), 9-7). Una épica remontada que moldeó a la máquina, y que entró en la historia de Wimbledon tras dos finales perdidas en los años anteriores contra Federer, con el primer de sus dos títulos (2010).
Nadal no se deja llevar por los recuerdos, tampoco el amargo de 2017 cuando Gilles Müller truncó su marcha triunfal en un maratón de cinco horas. Se le resiste la hierba al rey de la tierra, recientemente agigantado con su undécimo Roland Garros y otra gira exitosa que marcó el despegue de su curso con títulos además en Montecarlo, Barcelona y Roma. La poca adaptación al césped le obliga a encontrar el ritmo en plena faena, después de los entrenamientos en Mallorca y los dos partidos de exhibición en Hurlingham.
El sorteo le da pie a ello, a encontrar ritmo a base de rivales a priori asequibles desde que debute el martes ante Dudi Sela, sin serios obstáculos hasta unos hipotéticos cuartos ante Juan Martín del Potro. Se pondría serio el torneo, lógicamente, con el alemán Alexander Zverev o el serbio Novak Djokovic en semifinales. Para el de Belgrado es el punto de retorno, donde puso fin a su 2017.
'Nole' quiere volver a sentirse 'grande', algo que no podrá hacer Andy Murray, doble campeón de Wimbledon y que se bajó a última hora el domingo. Su reaparición con vistas al 'Grand Slam' británico, con derrotas en Eastbourne y Queens, no tuvo el mejor augurio, en un calvario de su lesión en la cadera que comenzó también en Londres. El 'Big Four' tendrá que esperar para juntarse de nuevo en un torneo.
La alternativa la pueden liderar John Isner, Nick Kyrgios, Sam Querrey, Milos Raonic, Grigor Dimitrov, Borna Coric y el finalista el año pasado Marin Cilic. Un cartel siempre variado al que últimamente no dan opción ni Federer ni Nadal, campeones de los últimos seis 'grandes'. Un toma y daca que puede no tener fin, si ambos se empeñan en repetir esa mítica final de hace una década.