MELBOURNE, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
David Ferrer (en la imagen), Tommy Robredo y Feliciano López alcanzaron la tercera ronda del Open de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, donde en el cuadro femenino les acompañará la madrileña Virginia Ruano Pascual.
Fue el tenista de Hostalric el encargado de cerrar la jornada por lo que a los españoles se refiere y lo hizo con una convincente victoria ante el ruso Dmitry Tursunov por 7-6 (4), 3-6, 7-6 (5) y 6-3, un rival peligroso y que ya había derrotado al español en la presente campaña en el torneo de Sydney.
En las pistas de Melbourne Park, el tenista ruso volvió a convertirse en una importante amenaza para Robredo en las tres horas y tres minutos que se prolongó el choque. Tursunov, de la mano de José Higueras su actual técnico, está encontrando su mejor nivel y olvidando las lesiones que se han convertido en una constante en su trayectoria.
Sin embargo, el español decantó hoy la balanza a su favor. Algo que consiguió merced a su mayor acierto en los momentos decisivos del choque, como en los desempates del primer y tercer set.
La resolución de esa tercera manga fue definitiva en el devenir del choque. Terminó por asentar el tenis de un Robredo que ya estaba completando un partido serio y completo, al mismo modo que finalizó con la resistencia del tenista ruso, quién ante el británico Tim Henman, había conseguido su primera victoria en el torneo en su segunda participación.
Una victoria que le permite a Robredo repetir la tercera ronda alcanzada el año pasado en tierras australianas. En aquella ocasión su 'verdugo' fue el chipriota Marcos Baghdatis, ahora tampoco tendrá un compromiso fácil ya que se encontrará ante el estadounidense James Blake, vigésimo favorito.
FERRER CONSIGUE SU MEJOR RESULTADO EN AUSTRALIA
Una altura del torneo que también alcanzó el alicantino David Ferrer, que tenía enfrente a otro viejo conocido como el italiano Daniele Braciali, rival de los españoles el año pasado en la eliminatoria por la permanencia de la Copa Davis que les midió a Italia.
El tenista de Javea, undécimo favorito, se impuso por 6-4, 6-4, 6-7 (5) y 6-2 en una hora y 50 minutos, en un partido marcado por la irregularidad de Braciali, que cometió hasta 84 errores no forzados, y cuyo triunfo le vale a Ferrer para mantener viva la opción de alcanzar en Australia el 'top ten' en la clasificación ATP.
También el triunfo supuso que el alicantino presente un balance positivo en los partidos disputados en 'Grand Slam' con 13 victorias por 12 derrotas y donde su mejor resultado fueron los cuartos de final disputados el año pasado en Roland Garros.
Mientras, en Australia consigue por primera vez superar la segunda ronda. Su próximo rival será Mario Ancic un jugador acostumbrado a la superficie rápida y que tiene en su servicio su principal 'arma', como lo demuestra que en el partido disputado hoy ante el checo Hernych no cedió ni una sola oportunidad de 'break'.
LJUBICIC, RIVAL DE FELICIANO LOPEZ
No será el único duelo hispano-croata de la tercera jornada. El toledano Feliciano López también tendrá un difícil compromiso ante el séptimo preclasificado en Australia, Ivan Ljubicic, que en la jornada de hoy derrotó al germano Philipp Kohlschreiber.
Feliciano López alcanza por tercera ocasión, y por segunda de forma consecutiva, la segunda ronda en el torneo 'aussie', una criba que hasta el momento no ha conseguido superar. Lo hizo después de imponerse a un Muller que no estuvo tan acertado como en la ronda inicial en la que consiguió hasta 24 saques directos ante el brasileño Ricardo Mello.
Un aspecto, sin embargo, en el que si que mejoró el español. Feliciano, que encuentra en su saque el pilar sobre el que construye su tenis, logró hasta 17 'aces', alcanzando una velocidad máxima de 213 kilómetros por hora, para imponerse por 6-2, 6-4, 7-6 (6) y 6-4.
La nota negativa de la jornada en el cuadro masculino la puso Guillermo García López. El tenista de La Roda protagonizó una actuación similar a la del año pasado cuando sorprendió a Carlos Moyá en la ronda inicial antes de perder en segunda.
En esta edición se impuso en su debut de otro cabeza de serie como el estadounidense Taylor Dent, pero luego no pudo ratificar esa imagen y cayó ante Julien Benneteau, un jugador procedente de la previa, por 6-4, 7-6 (3) y 6-1.
VIRGINIA RUANO, SUPERVIVIENTE ENTRE LAS MUJERES
En el cuadro femenino, la nota positiva llegó de la mano de Virginia Ruano. La madrileña alcanzó la tercera ronda, una altura del torneo que ninguna española disputaba en Australia desde que ella misma llegase hasta los cuartos de final en 2004, al sorprender a la rusa Elena Likhovtseva, décimo octava favorita, por un doble 6-4.
Se trataba de un duelo entre viejas conocidas. El primer choque entre ambas databa del 93 en Montpellier, pero que no se habían encontrado por el camino en los últimos siete años. Precisamente el anterior enfrentamiento también tuvo las pistas del Melbourne Park como escenario y en esa ocasión el triunfo correspondió a la rusa. Hoy Virginia Ruano Pascual, que en la próxima ronda se medirá a la estadounidense Laura Granville, se tomó la revancha.
Un camino que no consiguieron seguir ni Arantxa Parra ni Conchita Martínez Granados. La primera forzó la tercera manga ante la rusa Svetlana Kuznetsova después de levantar una bola de encuentro en el segundo set, pero no tuvo oportunidades de victoria. La barcelonesa no dio continuidad a su triunfo ante la japonesa Ai Sugiyama y cayó frente a Virginie Razzano.
Por lo demás la jornada estuvo marcada por la ausencia de sorpresas. En el cuadro masculino favoritos como Gaudio o Roddick tan sólo necesitaron de tres sets para solventar sus compromisos. Tampoco encontraron problemas en su andadura las féminas entre las que destacan el triunfo de Justine Henin Hardenne, campeona en 2004, Serena Williams, defensora del título, o Lindsay Davenport, actual número uno de la WTA.