El tenis español se queda sin Moyá, Ferrero y Almagro
PARIS, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El manacorí Rafael Nadal y el catalán Tommy Robredo fueron las notas positivas de una gris jornada para la 'Armada' en Roland Garros que despidió a dos de sus ex campeones, el valenciano Juan Carlos Ferrero y el mallorquín Carlos Moyá.
Nadal cumplió con los pronósticos ante Kevin Kim. El futuro del estadounidense, número 116 del mundo, pareció escrito desde que la fortuna le emparejó con el manacorí en la segunda ronda. La lluvia ayer le permitió hacerle un guiño, pero hoy no consiguió escapar del mismo.
Una lluvia que había mantenido durante tres jornadas alejado de las pistas parisinas a Nadal. Algo a lo que no está acostumbrado el número dos del mundo, inmerso en los días previos por los ecos del récord conseguido el pasado lunes al sumar su victoria 54 de forma consecutiva sobre tierra batida superando a Vilas.
Un dato del que quiere escapar Nadal. "Mi prioridad es Roland Garros por encima del récord", sentenció. "El lunes estaba nervioso, hoy también lo estaba y mañana lo estaré, pero es porque estoy ante un torneo muy importante", aseguraba. Eso lo dejó claro ante Kim, su próximo reto le llevará a encontrarse a Paul Henri Mathieu.
También cumplió con los pronósticos Tommy Robredo ante el checo Lucas Dlouhy. El de Hostalric se convertía en el primer español que alcanzaba los octavos de final confirmando su buen momento de forma que le llevó en las semanas previas a Roland Garros a hacerse con el título en Hamburgo.
El de Hostalric tendrá en Ancic a su próximo rival. El tenista croata, duodécimo cabeza de serie, se deshizo hoy en tres mangas del también español Albert Montañés, que por tercera vez había alcanzado la tercera ronda en París, y certifica su crecimiento sobre la tierra batida, la superficie que menos se adecua a sus cualidades.
También avanzó David Ferrer después de conseguir finalizar el encuentro aplazado en la jornada de ayer ante el francés Jeremy Chadry. Un encuentro que había dejado encarrilado después de hacerse con los dos primeros sets, pero que el francés, número 435 del mundo, logró prolongar hasta el cuarto.
La victoria del tenista de Jávea asegura un nuevo representante español en octavos de final, ya que su próximo rival será el también alicantino Rubén Ramírez Hidalgo, que ayer se vio favorecido por el abandono del belga Christophe Rochus.
LA MALDICION DE MOYA.
Tampoco consiguió superar la tercera ronda Carlos Moyá, cayó ante el ruso Nikolay Davydenko y lo hizo en la Suzanne Lenglen, la pista 'maldita' para el mallorquín que ha lapidado sus opciones en el torneo francés en sus últimas cuatro ediciones.
"No consigo mantener la bola viva, porque incluso con sol es la pista más lenta del torneo", confesaba Carlos Moyá. El mallorquín tenía en su servicio una de las principales armas para intentar desequilibrar al ruso Davydenko, sexto cabeza de serie y que ya alcanzó las semifinales en París durante la pasada edición.
Una táctica que no encontró los resultados apetecidos y a eso contribuyó la lentitud de la pista. "Era incapaz de moverlo de la línea de fondo", confesaba Moyá que de nuevo, y como sucedió en las semifinales de Estoril, caía ante el tenista ruso.
La de Davydendko fue una victoria contundente por 6-1, 7-5, 6-3. El octavo partido consecutivo que el ruso, que en la semana previa a Roland Garros se hacía con el título en Portschach, cerraba sin ceder un set. Un nuevo paso en un caminar que postula al ruso como una de la alternativas al favoritismo de Rafael Nadal y Roger Federer.
FERRERO 'PERDONA' A GAUDIO.
París también vio despedirse a Juan Carlos Ferrero. El valenciano se enfrentaba a Gaston Gaudio, en el primer encuentro entre dos campeones en Roland Garros en las últimas cinco temporadas, y la victoria sonrió al argentino en un partido que el de Onteniente tuvo controlado en varias ocasiones.
Fue Ferrero el primero que 'rompió' el partido en el primer set. Tuvo una ventaja de 5-3, pero la desperdició. Gaudio, que ofreció su mejor versión, reaccionó para hacerse con los cuatro siguientes juegos.
Más clara fue la oportunidad para el español en la segunda manga con 5-2 y dos bolas de set. De nuevo no pudo rematar y la reacción del argentino terminó con un mismo tanteo a su favor (7-5).
"Si hubiera conseguido algunos de los dos primeros sets el partido habría sido muy distinto", confesó el valenciano, quién a pesar de la decepción consiguió resistir hasta el desempate del tercer set. Allí logró levantar tres bolas de partido antes de contar con una nueva oportunidad para prolongar el choque. Falló en la puntilla y se despidió de París.
Por su parte, Nicolás Almagro se quedó en la reválida que suponía su encuentro ante James Blake. El murciano no consiguió cerrar un encuentro que había dejado encauzado ayer al hacerse con el primer set en el desempate. La reacción hoy del número ocho del mundo en tres mangas fue concluyente. También se quedó por el camino Fernando Verdasco ante un Juan Mónaco que demostró tenerle tomada la medida.
ANABEL MEDINA, UNICA SUPERVIVIENTE ENTRE LAS MUJERES.
En el cuadro femenino, Anabel Medina quedó como la única superviviente de la 'Armada', con lo que iguala su peor bagaje desde 2002 cuando Eva Bes se convirtió en su representante en dicha ronda. La valenciana, la única entre las españolas que arrancaba como cabeza de serie, se impuso a la estonia Kanepi, igualando la tercera ronda alcanzada el año pasado.
No lo tendrá tan fácil en su próximo enfrentamiento. Se medirá a la belga Kim Clijsters, segunda favorita, ante la que nunca se ha encontrado y que hoy ya se impuso a otra tenista española, la barcelonesa Conchita Martínez Granados.
