DESCONECTA, 26 May.
La suerte del repartidor de pizza, Edgar Martirosyan, cambió cuando la pizzería donde trabajaba recibió una llamada inesperada.

El pedido fueron unas 20 pizzas con queso, pepperoni, champiñones y aceitunas, que Martirosyan tenía que repartir a Los Oscar, pero no sabía que era para las estrellas. La sorpresa se la llevó en directo cuando la presentadora Ellen DeGeneres recibió al hombre encima del escenario y le terminó dando 1000$ de propina.


Ahora, este hombre ha sabido aprovechar la publicidad de aquel momento para abrir su propio restaurante junto con su hermano Erik al que han llamado 'Woods'.
Desde hace 8 años, los hermanos ya poseían la franquicia de la pizzeria Big Mama & Papa de Sunset Boulevard, la cadena responsable de repartir las pizzas aquella noche de los Oscar. Pero han decidido invertir esos 1000$ de propina en un negocio propio que llevaban tiempo soñando abrir.
El restaurante se especializará en pizzas artesanales estilo napolitanas cuyos ingredientes de calidad se importarán directamente desde Italia. La ubicación de 'Woods' se encuentra en Sylver Lake, Los Ángeles y abrirá sus puertas el mes que viene.
Los hermanos Martirosyan tendrán tiempo de sobra para experimentar nuevos sabores que sorprendan, quizás, para la siguiente gala de los Oscar.