EDIZIONES, 27 feb.
La etapa final de nuestra vida solemos imaginarla como lejana, tardía y casi ajena. Sin embargo, la vida está llena de sorpresas y la más inesperada de todas es precisamente el final de la misma. Lo que hoy das por sentado, mañana se puede convertir en un lujo, un regalo que no solemos apreciar hasta que somos conscientes de que se desvanecerá pronto.
En Reddit, un usuario que dijo haber trabajado con enfermos de cáncer terminal recopiló en una lista lo que sus pacientes consideraban que deberíamos apreciar mientras estamos vivos.
Lo interesante de la lista no es centrarse en cada uno de los puntos, pues son experiencias muy concretas de cada persona, sino captar la esencia de la lista en conjunto. Y el nexo de unión de todos los puntos son las cosas cotidianas, los pequeños gestos, los pequeños momentos como "el olor a lluvia" o "escuchar a tus abuelos contar historietas". Ni viajes, ni lujos, ni objetos materiales.
Así decía la publicación original:
Ver a mis hijos tirar una pelota de béisbol
Escuchar a mis abuelos contar historietas
Que mi novia me sorprenda con un beso en la mejilla
Coger a mi mujer en mis brazos sabiendo que no hay ningún lugar en el mundo en el que prefiera estar
Las cenas de los domingos y ver a toda la familia reunida
Mi perro
Ver a mi novio sonreír y sentir que sus brazos me rodean
Ver a mi hija corre hacia mí cuando llego a casa
El olor de las flores y la lluvia
Mi mujer: El día que me casé. Yo siempre dije que nunca lo haría. Y luego la conocí. Y ahora tengo que dejarla.
Oler la chimenea en la mañana de Navidad con la familia
Disfrutar a todos mis amigos
Ver a mi familia dormir
La prisa de las mañanas entre semana. Sé que suena loco, pero lo extrañaré. Extrañaré el café, los baños abarrotados, el adiós rápido de mi esposa, los niños olvidándose de su almuerzo...
La lluvia