El ex director gerente del FMI advierte de que España debe cambiar su modelo de crecimiento

Actualizado: jueves, 23 marzo 2006 17:55


MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Michel Camdessus advirtió hoy de que España debe cambiar su modelo de crecimiento, principalmente basado en los sectores de la vivienda y del turismo, y vaticinó que esta pauta de crecimiento se está aproximando a su límite.

"Es cierto que España crece rápido", aseguró el economista francés, pero "con débil productividad" y con "menos esfuerzo que otros para diversificar su economía hacia más investigación e innovación tecnológica".

El ex director gerente del FMI, que pronunció hoy una conferencia sobre España y el nuevo orden económico internacional en el marco de la Cátedra 'La Caixa', explicó que este modelo de crecimiento "se traduce en una menor adaptación a los mercados", y reconoció que los desequilibrios de la balanza comercial y de la balanza por cuenta corriente son "una asignatura pendiente de España".

Camdessus enumeró otros defectos de la economía española, además de la baja productividad, como las presiones inflacionistas y el insuficiente esfuerzo en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i). Sin embargo, precisó que las carencias del sistema "se corrigen mejor con dinamismo económico que sin él".

En este sentido, destacó los tres aspectos más positivos de la economía española, además de su dinamismo económico, que le ha hecho "un campeón del crecimiento dentro de la Unión Europea", que son el fuerte pragmatismo en el diálogo social, la apertura a la inmigración y el compromiso de España con la construcción de la Unión Europea.

Por otra parte, Camdessus señaló que España está "bien colocada" para entrar en las instituciones internacionales, en particular en el grupo de países más ricos del mundo G-8. Sin embargo, subrayó que este tipo de instituciones internacionales debe ser reformada.

"El problema es que el G-8, aún no ampliado a España, ya no es pertinente a los problemas del mundo", aseguró el francés, quien precisó que el problema más grave de la economía mundial de hoy es el problema de los desequilibrios de las balanzas de pagos, con Estados Unidos por un lado como deudor y China de otro como acreedor, y para resolverlo se requiere un grupo con deudores y acreedores, "con Europa de por medio", según Camdessus.

NECESIDAD DE REFORMAS EN FRANCIA

En relación con la fuerte protesta originada en Francia a raíz de a la aprobación por parte del Gobierno francés del Contrato de Primer Empleo (CPE), resaltó que el compromiso con el diálogo social que se da en España no se da en Francia, y destacó que su país tiene más facilidad "para hacer revoluciones que para hacer reformas".

Camdessus indicó que la flexibilización del mercado laboral en Francia es necesaria, y recordó que formó parte del grupo de trabajo que propuso el CPE y que recomendó al primer ministro francés, Dominique de Villepin, que llegara a un acuerdo con los agentes sociales antes de ponerlo en práctica. "Es necesario utilizar todas las formas de flexibilización para aumentar la cualificación de los trabajadores", agregó.

También llamó la atención sobre el hecho de que las clases tradicionalmente progresistas de Francia, que son los estudiantes y los trabajadores, son los que más se han opuesto a esta medida, al tiempo que destacó que su actitud inmovilista contrasta con la actitud progresista de protestas anteriores, como el mayo del 68.

CANCELACIÓN DE DEUDA

El ex director gerente se refirió también a la ola de populismo en América Latina, que muestra a su juicio que "el veneno populista está aún vivo" y que es una "debilidad recurrente" del continente latinoamericano. No obstante, precisó que se están produciendo muchos cambios en los últimos años, en especial, en la responsabilidad de las políticas macroeconómicas, y puso como ejemplo las actuaciones del Gobierno Luiz Inazio Lula da Silva en Brasil.

Respecto a la reciente cancelación de Brasil y Argentina de su deuda con el FMI, Camdessus resaltó que anteriormente "cuando un país pagaba al Fondo era un triunfo", y precisó que así ha sucedido en Argentina, pero destacó que desde hace unos años se le ha dado a la institución una imagen represiva y ésta ha sido la situación en Argentina, donde ha existido un "carácter populista de afirmación de su independencia" en la cancelación de la deuda.