MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
La compañía Iberia culminará el programa de renovación de flota,
contará con un terminal propio en el aeropuerto de Madrid-Barajas,
tendrá consolidada su nueva estructura empresarial y dispondrá de una
nueva sede social en el año 2003, según indicó el director general de
la compañía, Angel Mullor.
La compañía de bandera prevé recibir 18 nuevas aeronaves cada año
hasta el 2003, fecha en que habrá decidido qué avión sustituirá a los
actuales Boeing 747. En 1999, recibió dos aviones Airbus-321; un
total de ocho Boeing 757 y nueve Airbus 320, todos ellos de medio y
largo alcance, con una capacidad para más de 300 pasajeros. En 1999
se integraron a la flota un A-320; dos A-321 y un A-340.
Durante este año, están previstos tres A-340 (uno de los cuales se
recibió la pasada semana), cuatro A-318 y once A-320. Además, la
aerolínea tiene establecidas con Airbus cuatro opciones de compra
más.
Asimismo, Mullor indicó que en un plazo de tres meses tendrá que
decidirse qué aeronave sustituirá a los actuales siete Boeing 747 que
posee la compañía. Iberia decidirá entre el Boeing 777 y el
Airbus-3XX, un modelo que la empresa europea prevé comenzar a
fabricar en el año 2002. "Depende de sus ofertas", apuntó.
ALQUILER
Por otro lado, hizo referencia al nuevo diseño del aeropuerto de
Madrid-Barajas, previsto en el Plan Director, que tiene como objetivo
convertir al aeropuerto en un "hub" para Latinoamérica. Para ello,
Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (AENA) estimó necesario, al
igual que Iberia, crear un terminal exclusivo para la compañía de
bandera.
Al respecto, Mullor descartó la compra de este terminal, aunque se
mostró dispuesto a establecer con Aena un contrato de alquiler. "Nos
hubiera gustado que el terminal se hubiese ubicado en el centro de
las cuatro pistas, y no en un área lateral, aunque esta disposición
requiera una mayor inversión por las obras que conlleva", comentó el
responsable.
En este sentido, añadió que lo que resulta "un completo disparate"
es la disposición actual de los terminales respecto a las puertas de
embarque, "que obliga al pasajero a recorrer 3 kilómetros para llegar
de un sitio a otro".
NUEVA SEDE
A su vez, aseguró que la nueva sede de la compañía estará dispuesta
en el año 2003, que se ubicará en los terrenos que posee la aerolínea
en la Muñoza, adyacentes al aeropuerto de Barajas. En la actualidad
la sede social se encuentra en un edificio alquilado de la calle
Velázquez de Madrid.
La construcción de este nuevo edificio, que tendrá que contar con el
visto bueno de la Comunidad de Madrid, se llevará a cabo durante dos
años y supondrá una inversión cercana a los 4.000 millones de
pesetas, según Mullor.
Finalmente, quedará consolidada la nueva estructura empresarial,
basada en potenciar cada línea de negocio de forma independiente.
Esta reestructuración se abordará antes del próximo verano. Se
establecerá una nueva estructura encabezada por la actividad de
transporte de pasajeros, que será la cabecera del "holding", seguida
de los sectores de mantenimiento, "handling", carga y sistemas. Cada
uno de ellos, indicó, deberá "levantarse por sí solo y avanzar",
incluyendo la expansión internacional. Para tal objetivo señaló que
será necesario que Iberia se asocie con "los más grandes", tales como
Rolls Royce o General Electric en el campo del mantenimiento.
"El año 2003 será clave para la compañía porque estará preparada
para afrontar los retos de futuro de manera extarordinaria, aunque
hay que reconocer que estos tres años serán difíciles", concluyó.