La UE y Rusia crearán el viernes un mecanismo de alerta rápida sobre energía

Actualizado: miércoles, 24 octubre 2007 15:32


ESTRASBURGO, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Unión Europea y Rusia pondrán en marcha durante la cumbre que celebrarán el próximo viernes en la ciudad portuguesa de Mafra un mecanismo de alerta rápida sobre problemas de suministro energético. Sin embargo, la reunión no permitirá lanzar las negociaciones para un nuevo Acuerdo entre Bruselas y Moscú -que está previsto que incluya un capítulo prioritario sobre energía- porque se mantienen las restricciones rusas a la importación de carne polaca.

"Pretendemos llegar a un acuerdo sobre el lanzamiento de un mecanismo de alerta precoz en el sector de la energía", dijo el secretario de Estado de Asuntos Europeos de Portugal, Manuel Lobo Antunes, cuyo país ocupa la presidencia de turno de la UE, en una comparecencia ante la Eurocámara. "Dada la interdependencia entre la UE y Rusia en el dominio de la energía, es esencial aumentar la confianza y reforzar la mutua cooperación", agregó.

El objetivo de este mecanismo de alerta rápida, que se basará en un sistema reforzado de intercambio de información entre Moscú y Bruselas, es tratar de evitar situaciones como la que se produjo a principios de 2006, cuando Rusia cortó a Ucrania el gas por discrepancias en el precio y el conflicto acabó dejando sin suministro a varios países de la UE.

Los representantes de la UE aprovecharán la cumbre para presentarle al presidente ruso, Vladimir Putin, el paquete de liberalización energética propuesto por la Comisión el mes pasado, que obligará a desmembrar los grandes grupos energéticos y separar la propiedad entre las actividades de producción y la gestión de redes. También incluye un mecanismo para restringir la entrada en Europa de empresas energéticas extranjeras -como la rusa Gazprom o la argelina Sonatrach- salvo que sus países de origen autoricen inversiones de grupos energéticos comunitarios.

Antunes anunció que la presidencia portuguesa pedirá a Moscú que aplique los principios de "transparencia, no discriminación y previsibilidad" para que las empresas energéticas europeas puedan invertir en Rusia. "Instaremos a Rusia a evitar el recurso a políticas de acompañamiento, como medio ambiente o fiscalidad, para dificultar las inversiones existentes o crear obstáculos a nuevos inversiones", recalcó el secretario de Estado.

En todo caso, confirmó que la cumbre no servirá para iniciar las negociaciones para un nuevo Acuerdo entre la UE y Rusia que sustituya al actual, que caduca a finales de año, y que regule las relaciones en materia de energía. "Desgraciadamente, el inicio de negociaciones sobre un nuevo Acuerdo entre la UE y Rusia sigue estancado. Las restricciones para la importación de carne y productos vegetales polacos por parte de Rusia sigue siendo una grave traba para que empiecen esas negociaciones", explicó Antunes.

Añadió que la situación "se ha complicado todavía más" por la decisión de las autoridades veterinarias rusas en septiembre de prohibir la importación de carne producida por 36 empresas europeas. Polonia mantiene su veto al inicio de las negociaciones con Moscú en represalia por este embargo.

El representante portugués indicó además que "subsisten escollos para seguir colaborando con Rusia en materia de energía", y se refirió al caso del corte de suministro a Ucrania desde el oleoducto de Druzhba. "Ha pasado un año sin que Rusia haya facilitado información oficial sobre la fuga del oleoducto o sobre si se iba a reparar ese oleoducto para continuar con el suministro", lamentó.

En todo caso, Antunes restó importancia al hecho de que siga retrasándose el inicio de negociaciones entre la UE y Rusia y subrayó que en 2006 las dos partes decidieron prorrogar el actual acuerdo para evitar un "vacío legal" en las relaciones entre Bruselas y Moscú.

El representante portugués insistió en que, pese a estos problemas, las relaciones entre la UE y Rusia "evolucionan bien de manera general y son mucho mejores del retrato que se hace en la prensa internacional". En el mismo sentido se expresó la comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, que recalcó ante los eurodiputados que "Rusia no sólo es un vecino cercano sino que para nosotros es un socio estratégico".

ELECCIONES Y DEMOCRACIA

Tanto la presidencia portuguesa como la Comisión anunciaron que los líderes europeos pedirán a Putin que acepte la presencia de observadores de la OSCE en las elecciones legislativas que se celebrarán en diciembre y en las presidenciales de marzo. "La UE ha expresado repetidamente sus preocupaciones sobre la aplicación de los principios democráticos y los compromisos sobre derechos humanos en Rusia. (*) Las elecciones serán un test importante y esperamos que Rusia invite a los observadores de la OSCE", dijo Ferrero-Waldner.

La comisaria de Relaciones Exteriores afirmó que también se aprovechará la cumbre para plantear a Putin "nuestras preocupaciones en materia de derechos humanos, como las limitaciones a la libertad de prensa, los ataques a periodistas o la presión sobre las ONG".

Durante la cumbre se discutirá además sobre la entrada de Rusia a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y se firmará un acuerdo para incrementar la cantidad de acero que Rusia puede exportar a la UE. Asimismo, se rubricará un memorando de entendimiento entre el Observatorio Europeo sobre las Drogas y el órgano homólogo ruso, según Ferrero-Waldner.

La comisaria adelantó que Moscú anunciará durante la cumbre de Mafra una "importante contribución financiera" a varios programas transfronterizos de cooperación liderados por la UE para reducir la congestión de tráfico en los puntos fronterizos entre Rusia y los países Bálticos. "50 kilómetros colas no son aceptables para la UE", apuntó.

Entre las cuestiones negativas que enturbian las relaciones entre la UE y Rusia, Ferrero-Waldner destacó finalmente que Moscú todavía no ha firmado el acuerdo para acabar progresivamente con los recargos que aplica a los vuelos que pasan por Siberia pese a que se comprometió a hacerlo antes de Mafra.