BRUSELAS, 5 May. (EUROPA PRESS) -
Los comisarios de Política Exterior, Benita Ferrero-Waldner, y su homólogo de Energía, Andris Piebalgs, se reunierán hoy en Bruselas con representantes de los países del Mashrek, Irak y Turquía para analizar cómo estrechar la cooperación energética bilateral, especialmente en gas natural, y mejorar el suministro energético en la región de Oriente Próximo y en el conjunto de la Unión Europea. El objetivo último de la reunión es consolidar el gasoducto en construcción árabe como "futuro suministrador" del proyecto de gasoducto Nabucco.
El gasoducto árabe, que actualmente atraviesa territorio egipcio hasta Jordania y Siria, tiene capacidad para transportar 10.000 millones de metros cúbicos al año. La idea es conectar el gasoducto con Irak y Turquía a la altura de 2009, lo que proporcionará una nueva ruta para trasportar a Europa gas de los países del Mashrek --Egipto, Jordania, Líbano, los territorios palestinos y Siria--, y, más adelante, conectarlo con el gasoducto Nabucco.
El gasoducto árabe y su construcción se enmarca dentro de las actividades de cooperación en materia energética impulsada por el Proceso de Barcelona para precisamente estrechar la cooperación en una multitud de áreas a ambas orillas del Mediterráneo.
Mientras que los ministros de Energía de ambos lados del Mediterráneo se comprometieron el pasado diciembre de 2007 en Chipre a centrar su actividad en "armonizar los mercados regionales de energía" entre 2008 y 2013, la Comisión Europea trata de cerrar por su parte acuerdos de cooperación energética bilaterales con los países de la región. En el caso de Jordania, ya hay un acuerdo que se está aplicando, en el de Egipto, el Memorando de Entendimiento ya está completado, y con Irak se está todavía negociando.
Durante su reunión, a la que asistirán también los ministros de Petróleo sirio, Sufian al Alao, el viceministro y presidente de la Compañía de Gas Natural egipcia, Mahmoud Latif, así como representantes de Irak, Jordania, Líbano y Turquía, las partes analizarán también como reforzar la actual cooperación a través del centro de gas euroárabe Mashrek con sede en Damasco. El centro, con asistencia técnica de la Comisión Europea, lleva desde 2006 trabajando para desarrollar un mercado gasístico común en la región del Mashrek con vistas a integrarlo con el tiempo en el mercado europeo. El centro también brinda asistencia para terminar el gasoducto árabe.
EXPLOTAR LA COOPERACIÓN ENERGÉTICA
Por su parte, la comisaria de Relaciones Exteriores consideró importante "explotar en su totalidad el potencial de la ya bien establecida" cooperación energética con los países del Mashrek, Irak y Turquía, a los que calificó como "socios energéticos clave para la Unión Europea".
En este sentido, consideró en un comunicado que el nuevo gasoducto árabe que cruza por estos países y que debería estar terminado para finales de este año "abre importantes posibilidades como nueva ruta para el transporte de gas a la Unión Europea" y destacó el proyecto Nabucco, prioritario para Bruselas, "como un ejemplo de cómo se está trabajando juntos para integrar nuestros mercados energéticos en beneficio mutuo".
Por su parte, el comisario Piebalgs sostuvo que tanto los países árabes como Turquía y la Unión Europea "se enfrentan a desafíos energéticos similares", motivo por el cual defendió "encontrar soluciones comunes a problemas comunes, tales como el elevado precio del petróleo para los consumidores, el cambio climático y la seguridad en el suministro". A su juicio, "una respuesta común es necesaria" no sólo para impulsar la creación de oleoductos y gasoductos como el árabe "sino también con medidas de eficiencia energética" o la promoción de las energías renovables a ambos lados del Mediterráneo.
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