MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El precio de la gasolina super de 95 octanos se situó el 1 de octubre en 1,066 euros por litro, un 1,05% más que a comienzos de septiembre, mientras que el litro de gasóleo de automoción se cambió por 1,004 euros, un 3,2% más, según el último Boletín Petrolero Semanal de la UE.
Este encarecimiento de los combustibles se produce después de que durante el mes de agosto el precio de la gasolina descendiese un 1,7% y el del gasóleo, un 0,9%. Aun así, desde la primera semana de 2007 los precios de la super 95 acumulan un incremento del 7,5%, mientras que el gasóleo se encareció un 8,4%.
En todo caso, el boletín difundido muestra que los combustibles de automoción siguen en España por debajo de la media de los trece países de la zona euro, donde el litro de super 95 cuesta 1,28 euros y el de gasóleo, 1,18 euros.
Los países de la UE con la gasolina más cara son Países Bajos (1,46 euros el litro), Reino Unido (1,38 euros), Bélgica y Alemania (ambos con 1,36 euros). Portugal, con 1,32 euros, también figura en este grupo, que contrasta con el de los precios más bajos, formado por Estonia (0,89 euros), Lituania (0,90 euros) y Letonia (0,93 euros).
En el caso del gasóleo, Reino Unido es con diferencia el país con precios más altos, de 1,41 euros por litro, lo que contrasta con los 89 céntimos de euros por los que se paga el litro en Estonia.
Uno de los motivos que explican que en España el combustible sea más barato es su menor carga fiscal. De hecho, el litro de super sin plomo de 95 en España antes de impuestos cuesta 51 céntimos, por encima de los 49 céntimos de la media europea, mientras que el precio del gasóleo es de 55 céntimos el litro, por encima de los 53 céntimos de media de los países del entorno, pero la tendencia cambia cuando se aplican los impuestos.
El precio del barril de Brent de crudo se situaba esta mañana en torno a los 77 euros en el Intercontinental Exchange (ICE) de Londres, después de haber roto la semana pasada el umbral de los 80 euros. Las presiones en el mercado proceden, además de los problemas de suminisitro, de la incertidumbre financiera.
El encarecimiento del crudo y de los productos derivados del petróleo ya hicieron que los precios de los carburantes alcanzaran en 2006 niveles inéditos. De hecho, el precio de la gasolina se situó el año pasado en 1,137 euros por litro en la última semana de julio.
