Álvarez (Santander) reclama una política de rentas y prevenir la mortalidad empresarial para lidiar la crisis

El consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, durante la presentación de resultados del primer trimestre de 2020.
El consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, durante la presentación de resultados del primer trimestre de 2020. - BANCO SANTANDER - Archivo
Publicado: martes, 2 junio 2020 13:10

Reconoce las dificultades crediticias a las que tendrá que hacer frente el sector bancario

MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente y consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, considera que una política de rentas en el corto plazo y la prevención de la mortalidad de las empresas son elementos fundamentales para una recuperación rápida e intensa de la crisis ocasionada por la expansión del coronavirus.

Así lo ha señalado en el VIII Foro Anual del Consejero organizado por KPMG, El País y el IESE con la colaboración de AON y Gobertia, un evento que ha iniciado este martes y que se prolongará durante varias jornadas.

Respecto a las empresas, Álvarez cree que el apoyo debe ir dirigido sobre todo a las pequeñas, medianas y microempresas, así como a autónomos. "Es una estructura que tiene que volver de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo con una suficiente fortaleza y confianza como para seguir invirtiendo", ha dicho.

Esta es la forma en la que cree que se podrá recuperar el Producto Interior Bruto (PIB) y el empleo perdido durante la pandemia. También ha hecho referencia a las bases fiscales "enormemente dañadas" y que habrá que consolidar inmediatamente después del actual escenario.

Álvarez ha reconocido que sería muy difícil segur financiando a la economía sin la red de seguridad que los gobiernos han puesto en marcha en los distintos países.

Mientras, la misión de la banca es la de ayudar a las personas y a las empresas a prosperar, permitiendo que encuentren las capacidades para sobrevivir gracias al apoyo mediante la financiación y de convencer a los agentes como proveedores e instituciones públicas para que pongan de su parte.

En cuanto a los elementos que afectan directamente a Banco Santander, su consejero delegado ha asegurado encontrarse en una posición "sólida" como para amortiguar y absorber el shock de esta crisis, si bien ha admitido que el sector afrontará dificultades crediticias.

En este sentido, la entidad valorará el próximo octubre las circunstancias y si es factible distribuir o aplicar los dividendos. "Todo dependerá de la capacidad de generación de resultados, todavía hay muchos elementos de incertidumbre", ha subrayado.

Así, ha hecho referencia a la provisión con carácter prudencial dispuesta en el primer trimestre del año, basada solo en modelos de riesgo que estimaban potenciales impactos futuros. El coste del crédito final que se tendrá que asumir dependerá de las "famosas discusiones" de si la recuperación de la crisis es en 'V', en 'W' en 'L'.

En cualquier caso, ha afirmado que los volúmenes de clientes con algún tipo de moratoria, ya sea del principal, de los intereses, o de ambos, ya es muy alto y ha seguido creciendo.

SIN CAMBIOS DE ESTRATEGIA EN EL MODELO

Por otro lado, Álvarez ha asegurado que la entidad no cambiará su estrategia general, aunque sí que adelanta cambiar el énfasis sobre algunos asuntos como los 'call centers'.

"La crisis nos ha sorprendido y hemos visto que las operaciones no se han resentido a pesar de tener a 110.000 personas trabajando desde casa", ha indicado.

Por esta razón, es posible que su programa de 'flexiworking' vaya bajando a otros niveles departamentales. "Mi expectativa es que va a incrementarse el trabajo desde casa. Esto quedará porque se ha demostrado que se puede hacer muy bien. La presencia física puede no ser tan determinante", ha añadido.

No obstante, ha precisado que esto afectará más bien a los servicios centrales, ya que los clientes requieren de horario concreto en las oficinas. Sin embargo, ha destacado el salto a los medios digitales por parte de colectivos menos propensos a operar por esta vía.

OFICINAS Y MUNDO DIGITAL

Preguntado por si este efecto podría conllevar el cierre de sucursales, Álvarez ha dicho que es un proceso que podría acelerar los tiempos, aunque subrayando que las pautas las marcan los clientes.

En cualquier caso, ha dicho que el periodo de confinamiento no es una forma de medir el uso que los clientes dan a la red de oficinas y que habrá que ver qué ocurre cuando exista libertad de movimientos.

En este orden de cosas, Álvarez sí ha destacado que el tipo de servicios que se ofrece en una sucursal irá evolucionando y, esto, determinará el número de oficinas, a qué distancia se sitúan y la configuración de las mismas.

SIN CAMBIOS EN LA DINÁMICA DEL CONSEJO

Por otra parte, el banquero ha explicado que cuando se decretó el estado de alarma el banco puso en marcha sus planes de contingencia inmediatamente, al tiempo que ha asegurado que la dinámica del consejo de administración no ha cambiado, solo la temática.

Respecto al éxito en el funcionamiento del órgano de gestión, Álvarez ha apuntado a su alta diversidad en aspectos de nacionalidad o background, lo que "enriquece las discusiones", y a los principios de funcionamiento recogidos en los códigos que se aplican en todas las filiales y subsidiarias.

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