SANTANDER, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los secretarios generales de CC.OO, y UGT, Ignacio Fernández Toxo, y Cándido Méndez, respectivamente, rechazaron hoy la posibilidad de que el Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB) que ultima el Gobierno abra la puerta a la entrada de bancos en el capital de las cajas de ahorro a través de las cuotas participativas con derechos de voto.
Los sindicalistas, que participaron en un curso de la UIMP sobre la crisis y el futuro del sector financiero, se mostraron de forma tajante en contra de que el nuevo esquema bancario en España pase por que las cajas de ahorros pierdan su naturaleza de entidades con una fuerte vocación social, y defendieron un sistema financiero dual que diferencie entre bancos y cajas.
"No es el momento oportuno para que en operaciones alambicadas el sector bancario acabe quedándose con activos de las cajas", dijo Toxo, quien reclamó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que invite a los sindicatos a participar en la definición última del plan de rescate bancario antes de su traslado al Parlamento.
La inclusión de la figura de las cuotas participativas con derechos políticos en el FROB responde a una condición impuesta por CiU con el objetivo de blindar eventuales fusiones entre entidades más allá de los límites de las comunidades autónomas, según Toxo, que aventura un rosario de fusiones e integraciones entre cajas de ahorros porque la intervención de Caja Castilla-La Mancha (CCM) sólo es "la punta del iceberg" de los problemas que atraviesa el sector financiero en España.
Por su parte, Méndez sostuvo que no tiene conocimiento explícito de que el FROB contemple la posibilidad de que los bancos entren en el capital de las cajas de ahorros, pero sostuvo que el Ejecutivo debería explicar de qué forma se devolverán al sector privado las cuotas participativas con derechos de voto que asuma el Estado en un momento dado.
En este sentido, recalcó que es necesario que el Ejecutivo rellene "lagunas de información" respecto a la privatización de las cuotas participativas con derechos de voto que asuma en caso de que una entidad atraviese problemas, y recordó que la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, reconoció ayer que el sistema financiero atraviesa problemas de solvencia.
No obstante, Méndez no rechazó que el Estado cuente con derechos políticos en las cajas cuando compre cuotas participativas e incluso apoyó la idea de que permanezca en el capital de dichas entidades para contribuir a facilitar la fluidez del crédito a familias y empresas, por lo que su preocupación se refiere exclusivamente a la compra de activos de cajas por parte de bancos.
MARGEN DE MANIOBRA DEL BANCO DE ESPAÑA.
Para ambos dirigentes, el Banco de España debería tener las manos "un tanto más libres" de lo previsto para dirigir la reordenación del sistema financiero español y no sería conveniente que los bancos compraran activos de cajas, escenario con un "alto nivel de probabilidades" de materializarse a falta de que el FROB establezca lo contrario.
"Hay que preservar la naturaleza jurídica de las cajas, que es lo más parecido a una banca social en provincias, comarcas y comunidades autónomas", apuntó Toxo, para quien la aprobación del FROB de aquí a fin de mes "es urgente, pero nos se puede hacer sin los interlocutores sociales", sobre todo en cuanto a los efectos sobre los trabajadores que pueda tener el previsible cierre de oficinas.
Asimismo, el sucesor de José María Fidalgo se mostró contrario a que las entidades en problemas reciban ayudas públicas para sanear su situación antes de que se lleve a cabo su integración con otras, y apostó por que el dinero público venga a posteriori y se condicione al cambio de gestores y órganos de gobierno.
