MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -
El fuerte crecimiento de los negocios de banca mayorista y gestión de patrimonios ha impulsado la penetración de la banca extranjera en España, algo que se refleja en el aumento del número de sucursales de entidades foráneas en España, que en 2006 se situó en 71 oficinas (seis más que en 2005), frente a las 58 contabilizadas en 1995, según un estudio de DBK.
A pesar del crecimiento del número de operadores, la banca extranjera se enfrenta a una creciente competencia procedente de entidades españolas, que en 2006 aumentaron su cuota en los principales segmentos del mercado de banca mayorista, explicó la compañía de análisis.
Entre 2005 y 2006, más del 80% del volumen de emisiones en el mercado de capitales y más del 50% del volumen de préstamos sindicados permanecía en manos de entidades extranjeras. Sin embargo, la presencia de éstas en las áreas de banca privada y fondos de inversión era menos relevante.
El segmento de actividad que registró un mayor crecimiento durante 2006 fue el de corporate finance, como consecuencia del fuerte dinamismo de las operaciones de fusiones y adquisiciones de empresas, cuyo volumen creció cerca de un 70%. También los mercados de préstamos sindicados y emisiones de deuda mostraron un comportamiento favorable, registrando ambos crecimientos superiores al 20% en 2006.
Según refleja el estudio, la mayoría de las entidades extranjeras presentes España han optado por establecerse como sucursales para prestar servicios de banca mayorista, aunque existen algunas excepciones, como Deutsche Bank y UBS, establecidas como bancos.
Francia, Alemania y Reino Unido son los países con un mayor grado de penetración operando en España a finales de 2006, con un total de 20, 11 y 9 sucursales dependientes de matrices radicadas en dichos países, respectivamente.
Por otro lado, el informe de DBK explica que es previsible que se avance en el proceso de concentración bancaria durante los próximos años, en el que habrá un creciente protagonismo de fusiones y adquisiciones transfronterizas.
Sin embargo, en el mercado español de banca mayorista están tratando de reforzar su posición entidades con una actividad discreta hasta la fecha, como las cajas de ahorros y algunos bancos medianos. Asimismo, entidades extranjeras que desarrollan otro tipo de actividades en España han anunciado el próximo inicio de operaciones en banca mayorista.
Por otro lado, DBK considera que aunque las necesidades de financiación de las empresas españolas seguirán siendo satisfechas fundamentalmente mediante préstamos, es previsible que adquieran más protagonismo los mercados de capitales. También alcanzarán mayor impulso determinados ámbitos dentro de la financiación estructurada y de proyectos.
DBK considera que a partir de 2008 es previsible que se produzca una ralentización de la actividad, que se reflejará en una intensificación de la competencia entre las entidades, sobre todo en lo relativo a los precios en las operaciones de financiación.
