BURGOS, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Caja de Burgos, José María Arribas, y el director general, José María Achirica, presentaron hoy en rueda de prensa el balance de resultados del ejercicio 2006 y los objetivos del plan de gestión para 2007, año en el que se espera un aumento del beneficio de entre un 5% y un 10%.
La entidad ha experimentado "una expansión muy positiva" y ya desarrolla el 40% de su volumen de negocio fuera de Burgos, principalmente en el ámbito regional, además de que prevé la apertura de 27 nuevas oficinas.
La vocación regional de la entidad, además de la apertura de oficinas en todas las provincias, que se completará entre 2007 y el primer semestre de 2008, se centra también en la apuesta por la empresa de Castilla y León y el posicionamiento institucional.
2006 fue calificado de "excepcional" por los responsables de la entidad al haberse finalizado con un activo total de 9.795,16 millones de euros, un 22,84 por ciento más que en 2005, y un beneficio de 106,84, un 31,56 por ciento superior al del ejercicio precedente.
Arribas calificó de "avance a pasos agigantados" el conseguido en 2006 y apostó por una "caja diferente, la caja que queremos, en la que el cliente encuentre algo que no le ofrece el resto del mercado, un asesor de confianza", dijo. Se refirió a la vocación de expansión de la caja, asunto al que se refirió como "el salto de lo provincial a lo regional".
ACHIRICA DEJARÁ EL CARGO
El director general, José María Achirica, que anunció que dejará el cargo en diciembre de este año, basó el éxito de la organización en cinco claves: el incremento del negocio, la situación de las Bolsas, la evolución del mercado inmobiliario, la contención en el gasto y la reducción de la tasa de morosidad hasta un 0,51, por debajo de la media del sector que es de 0,55.
Los principales datos financieros, los del activo total cercano a los 9.800 millones de euros, se completan con otros como el relativo a recursos ajenos (7.583,36 millones), el de crédito a la clientela (6.760, 67 millones), la posición de la cartera de valares (2.040,04 millones) o el patrimonio neto, que se sitúa en 1.091,57 millones.
Achirica aseguró que "cada 100 euros que movemos en Caja de Burgos generan 1,43 euros", según los datos de 2006, y destacó que la entidad está a la cabeza en créditos por empleado y oficina.
Esta excepcional situación económica se ha reflejado en la obra social, que ha crecido un 42,86 por ciento y supone 30 millones de euros.
Para 2007, Caja de Burgos aspira a mejorar en excelencia en los cinco ámbitos establecidos en el Plan Estratégico 2006-2008: clientes, personal, organización, resultados y sociedad.
Otro de los objetivos es la apertura de 27 oficinas nuevas, de las cuales cinco se ubicarán en Burgos, diez en Madrid y seis en otras provincias de Castilla y León. El resto se instalarán en otras cuatro comunidades autónomas.
Los responsables de la entidad mostraron su confianza en los productos específicos de los que dispone Caja de Burgos y apostaron por mantener su eficacia (enlaza, canal móvil). No descartaron una diversificación de la financiación de mayoristas con aperturas a los mercados el dólar o la libra.
Achirica anunció que en 2007 se publicará la primera memoria de responsabilidad social corporativa al finalizar el Plan Estratégico para la Obra Social en 2006. El nuevo plan para esta área concreta incluirá más actuaciones dirigidas a los jóvenes, al medio ambiente o a proyectos como Foro Burgos o Arte en la Catedral.
Desde el punto de vista financiero, las previsiones son de crecimiento en créditos, préstamos hipotecarios, créditos al consumo y la implantación de nuevos productos tanto de activo como de pasivo.
En 2007, según anunció Achirica, la plantilla crecerá en 100 personas. Argumentó que el crecimiento a todos los niveles conseguido en 2006 será difícil de repetir en un ejercicio, el 2007, que calificó de "año de transición".
