Esta iniciativa tiene un horizonte de cuatro años, en los que se espera dar entrada a más de 3.000 millones de euros de inversión
MADRID, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Instituto de Crédito Oficial (ICO) prevé servir de palanca de entrada en España a seis gestoras de capital riesgo de reconocido prestigio, para que inyecten antes de que acabe el año alrededor de 600 millones de euros en empresas españolas --el doble que en lo que va de año--, una operación que esperan que sea un auténtica revolución en el sector.
Según fuentes del organismo, el ICO ha constituido para ello, a través de su gestora de capital riesgo Axis, el fondo denominado FOND-ICO Global, que dispondrá de recursos con los que complementar las inversiones de gestoras de capital riesgo nacionales e internacionales que deseen invertir en España en un horizonte de cuatro años y que vean en este instrumento el incentivo definitivo para hacerlo.
La aportación inicial del ICO en estas primeras seis gestoras será de unos 200 millones de euros, ya que en cada operación pondrá entre un 30% y 40% de los recursos.
En operaciones sucesivas (cada trimestre aproximadamente), el organismo adscrito al Ministerio de Economía aportará un total de 1.200 millones de euros con la perspectiva de dar entrada a más de 3.000 millones de euros, procedentes de unas 40 gestoras, que irán directamente al capital de empresas españolas, especialmente pymes, hasta recuperar los niveles de inversión que había antes de la crisis.
La aportación del ICO sólo será de capital porque no intervendrá en ningún tipo de gestión, si bien establecerá unos principios de transparencia y recibirá la información que le reporten sobre el funcionamiento de este proyecto las empresas que reciban inyecciones de capital.
PRIMER PASO, EL 31 DE OCTUBRE.
Así pues, el primer paso se dará ya este miércoles, 31 de octubre, cuando se conozcan las primeras seis gestoras de capital riesgo seleccionadas de entre las que han concurrido a la primera licitación convocada por el ICO, con las que arrancará el proyecto.
Tres de estas entidades se centrarán en inversiones de 'venture capital', para empresas que dan sus primeros pasos, y otras tres, en fondos en expansión.
Para invertir en el marco del FOND-ICO Global, la sociedad gestora debe esta registrada por el correspondiente organismo regulador dentro de la OCDE, debe haber gestionado ante algún fondo de capital riesgo, debe afrontar una comisión de gestión del 2,5% para 'venture capital' y 2% para fondos en expansión.
Además, el ICO aportará hasta un 40% del total del fondo en el caso de 'venture capital', hasta un máximo de 20 millones de euros, y un 30% en el fondos de expansión, hasta 70 millones de euros. Así, de alcanzarse estos niveles máximos en la primera licitación de este año, el ICO desembolsaría un total de 270 millones.
Si bien, desde el ICO señalan que a la hora de seleccionar las entidades gestoras "puntúa más que pidan menos" aportación por parte del ICO, por lo que prevé que este desembolso ronde los 200 millones de euros.
Esta iniciativa se inspira en una similar puesta en marcha con éxito en Israel y está a la altura en volumen y operatividad de otros que funcionan en Europa, según las mismas fuentes.
Por ello, a la espera de lo que reporten las empresas que cuenten con la "levadura" que supondrá para ellas estas inyecciones de capital, el ICO ya adelanta que si se dispusieran antes de los cuatro años marcados el total de las inversiones previstas, no habría problema en ampliar el fondo.
UNA "TRANSFORMACIÓN" DEL CAPITAL RIESGO EN ESPAÑA.
El organismo presisido por Román Escribano ha explicado que esta iniciativa se enmarca en los esfuerzos del Gobierno por dar un impulso a los cauces de financiación no bancaria, en un contexto de dificultades en el crédito para las empresas.
Si bien, de entrada aseguran que este FOND-ICO Global ya ha suscitado mucho interés entre los inversores privados y supondrá "una transformación del capital riesgo en España".
Al margen de este cauce de financiación no bancaria, el ICO sigue desarrollando su actividad de mediación en colaboración con las entidades financieras comerciales. Al respecto, desde el organismo se descarta abrir vías para compartir el riesgo de los créditos con la banca, porque supondrían unas provisiones que frenarían su capacidad de préstamos.
Sin embargo, cree que se podría llegar a un esquema mixto en el marco de la Iniciativa Pyme de la UE, en el que ésta asumiera parte de estos riesgos con aportaciones de fondos estructurales.
