Sáenz ve "injusto" acusar a la banca española de ocultar pérdidas por el deterioro de activos inmobiliarios
MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado del Santander, Alfredo Sáenz, advirtió hoy de que 2010 va a ser un año "complicado" para la banca nacional por la lenta recuperación de la economía española, pero descartó que vaya a quebrar alguna entidad, porque para evitar eso está el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
"No va a ser un año bueno", dijo Sáenz en la presentación de los resultados trimestrales, si bien consideró que no existe el riesgo de que en este complicado escenario económico -con una "macroeconomía mala" y un crecimiento inferior al de la media europea- vaya a caer un banco o una caja de ahorros.
"No creo que exista ese riesgo", argumentó el consejero delegado del Santander, tras expresar su deseo de que no quiebre ninguna entidad financiera en España, porque sería algo "muy malo" tanto para las entidades grandes como para las de menor tamaño.
Sobre la reestructuración del sistema financiero español, Sáenz resaltó que se asistirá a procesos de concentración y al adelgazamiento de la sobre capacidad de redes comerciales que proliferaron en los años de bonanza, fundamentalmente de las cajas de ahorros.
"Creo que con una alta probabilidad se reducirá la capacidad del sector", lo que va en línea con las recomendaciones realizadas desde el Banco de España, indicó. "Tras años de 'boom' y de fuerte aumento de la capacidad instalada, esto se tiene que ajustar, está claro", adelantó.
MEJORAR LA CUOTA EN ESPAÑA.
En este sentido, consideró que los bancos tienen "posibilidades de mejorar su cuota de mercado" con la disminución de la red comercial de las cajas de ahorros, y vaticinó que el proceso de cierre de oficinas se prolongará más allá de 2010 porque "durará años". Desde el punto de vista de la competitividad, explicó, "es posible que suframos menos los más fuertes", avanzó.
La crisis económica "todavía no ha escampado", por lo que el Santander cuenta con unos niveles de capital muy elevados para afrontar el futuro, y ante eventuales cambios regulatorios que impliquen mayores exigencias de capital, indicó el consejero delegado.
Por otro lado, Sáenz consideró hoy "injusto" acusar a la banca española de ocultar pérdidas por el deterioro de activos inmobiliarios, tal y como ha hecho la agencia de calificación financiera Moody's, e insistió en que el sistema financiero nacional se caracteriza por la estricta supervisión del Banco de España.
"Tenemos todos los días a 70 inspectores del banco", aseveró el consejero delegado para ilustrar que "es de todos conocido" el férreo control que ejerce el organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez sobre el sistema financiero, y añadió que los Fondos de Garantía de Depósitos en España están muy dotados.
