Economía/Laboral.- La contratación temporal en la Administración General se redujo un 32% hasta octubre

Actualizado: miércoles, 24 noviembre 2010 15:46

MADRID, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

La secretaria de Estado para la Función Pública, Consuelo Rumí, ha adelantado que la contratación temporal en la Administración General del Estado (AGE) se ha reducido un 32% en los diez primeros meses del año, lo que supone un porcentaje "muy superior" al compromiso con los sindicatos de recortarlo al 8%.

"Al Gobierno le preocupa mucho la temporalidad. Hemos cumplido el compromiso con los sindicatos más allá", se felicitó Rumí durante su comparecencia en la Comisión de Presupuestos en el Senado, para después recordar que los Presupuestos de 2011 contemplan una tasa de reposición del 10% para todas las administraciones públicas, estos es, la AGE más comunidades autónomas y corporaciones locales.

"La tasa de reposición del 10% es de obligado cumplimiento para todas las administraciones. En 2010 fue del 15%", enfatizó la secretaria de Estado.

Ante el reproche del PP por la rebaja de los salarios de los empleados públicos, Rumí insistió en que esta reducción del sueldo de los funcionario fue una medida "dura, pero necesaria", por lo que descartó que se tratara de un ajuste "indiscriminado".

En este sentido, subrayó que el Gobierno está "dando cumplimiento" a algunos de los objetivos "más significativos" comprometidos con los sindicatos, como la creación de un Observatorio del empleo público y la referida a la contratación temporal.

PARTIDAS A SINDICATOS CONGELADAS.

La secretaria de Estado también se refirió a las partidas destinadas a los sindicatos de la Función Pública, cantidad que asciende a los 1,2 millones de euros y congelada para este año, al lamentar el "desprestigio" urdido por el PP contra las centrales. "No hay un enfrentamiento ficticio entre sindicatos y funcionarios", zanjó.

Por último, Rumí garantizó que los contactos con los sindicatos no se han interrumpido tras la huelga en la Función Pública y la general del 29-S, si bien admitió que alcanzar consensos es "más difícil".