MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Federación del Exterior del sindicato UGT ha convocado para el próximo martes una concentración frente al Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación para protestar por lo que considera la "extrema indefensión legal" de miles de empleados públicos en las embajadas españolas.
El secretario general de la federación, Damián Peña, consideró "imprescindible" negociar un "convenio colectivo" para "mejorar" los intereses de España y los "derechos de los trabajadores españoles en países que carecen de garantías legales".
A juicio de Peña, el servicio exterior español necesita una "reforma integral urgente" y parte "esencial" de esta reforma tiene que suponer "el final de la situación de incertidumbre e indefensión legal en que se encuentra el personal" de este servicio, que incluye a más de 6.000 ciudadanos españoles que trabajan en embajadas, consulados, oficinas comerciales y de turismo, centros del Instituto Cervantes y demás oficinas sectoriales de España en el exterior.
En un comunicado, Peña denunció que muchos de estos empleados trabajan en países con estructuras predemocráticas donde apenas existen garantías legales. "La falta de un convenio colectivo implica que una gran cantidad de trabajadores están sometidos a la legislación y jurisdicción laboral de países como Sudán, Congo, Arabia Saudí o Irak", argumentó.
Las reivindicaciones de la Federación del Exterior de UGT incluyen la equiparación del personal del Servicio Exterior con el resto de los empleados públicos de la Administración General del Estado, la negociación de un convenio colectivo y elecciones sindicales para el personal laboral, así como el fin de la arbitrariedad en la movilidad de los funcionarios.
Estas y otras reivindicaciones, como la de encontrar una solución urgente a la grave situación fiscal en la que se encuentran los trabajadores del Servicio Exterior español en Estados Unidos, forman parte del documento que se entregará al Ministerio de Asuntos Exteriores en el marco de la concentración del próximo martes, que también apoya el sindicato CSI-CSIF.
Por último, Peña argumentó que el Estado y los ciudadanos necesitan "un servicio exterior moderno y eficaz, capaz de defender los intereses" de España en todo el mundo.
