MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha agradecido al vicepresidente de Inditex, Carlos Espinosa de los Monteros, que haya accedido a trabajar de manera "altruista", sin recibir un sueldo público a cambio, para el proyecto del Gobierno de mejora de la imagen exterior del país, conocido bajo el nombre de Marca España.
El Consejo de Ministros ha aprobado el nombramiento de Espinosa de los Monteros como Alto Comisionado de la Marca España, figura a la que el Ejecutivo da una "especial importancia en este momento en que es necesario trabajar y potenciar la Marca España", ha explicado la vicepresidenta.
"España es un país referente en muchísimos ámbitos y tiene que tener una imagen acorde con su potencial económico, social, cultural, artístico y deportivo", ámbitos en los que nuestro país presenta "grandes fortalezas que es necesario poner en valor", ha subrayado.
Espinosa de los Monteros es en la actualidad, además de vicepresidente de Inditex, presidente de Fraternidad Muprespa y consejero de Acciona y Schindler.
Nacido en 1944 en Madrid, es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense y en Administración de Empresas por ICADE. Pertenece además al Cuerpo de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado.
Trabajó con anterioridad en el sector público como consejero comercial de España en Chicago y director comercial y vicepresidente del Instituto Nacional de Industria.
También fue presidente de Iberia y Aviaco, consejero delegado de Cenemesa, así como presidente de Mercedes Benz España, Daimler-Chrysler González-Byass. También fue presidente del Círculo de Empresarios y de Anfac.
Como Alto Comisionado de la Marca España, asumirá la coordinación de todas las actuaciones relacionadas con la promoción de la imagen exterior de España.
Aunque tendrá rango de secretario de Estado, no percibirá remuneración por ello. Tan solo tendrá derecho a indemnización por los gastos de viaje, estancias y traslados que le origine el desempeño de sus funciones.
Dependerá directamente del presidente del Gobierno quien, con apoyo del Consejo de Política Exterior, fijará las estrategias para promover la Marca España. Y dispondrá de una oficina cuyos gastos se cargarán al presupuesto del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.