El Congreso acorta plazos para cumplir la Estabilidad Presupuestaria y la próxima semana aprueba la ley

Cristóbal Montoro
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 3 abril 2012 20:35


MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Congreso ha incluido en el proyecto de Ley de Estabilidad Presupuestaria las enmiendas del Grupo Popular que, en su mayor parte, endurecen los plazos previstos inicialmente por el Gobierno, y la próxima semana procederá a la aprobación del texto, en comisión y en sesión plenaria, para su remisión al Senado.

Según han indicado a Europa Press fuentes parlamentarias, la ponencia parlamentaria encargada del proyecto de ley se ha reunido "apenas cinco minutos" y sólo ha incorporado las enmiendas de los 'populares' que, entre otras cosas, reducen los plazos en los que las administraciones públicas deberán aprobar los planes económico-financieros o de reequilibrio para corregir los desajustes de sus presupuestos, acortan el tiempo en los que se deberán redactar los informes de seguimiento, y también amplían los supuestos que dan lugar a la aplicación de medidas coercitivas por parte del Estado.

Así las cosas, las más de 170 enmiendas presentadas por la oposición serán debatidas en la Comisión de Hacienda de la Cámara baja este lunes por la tarde y, una vez superado este trámite, se remitirá un dictamen al Pleno de la Cámara baja, que lo someterá a consideración previsiblemente el jueves 12 junto con las enmiendas parciales que se mantengan vivas.

El texto que se apruebe se remitirá entonces al Senado, que puede interponer un veto, poco probable ante la mayoría absoluta del PP; introducir enmiendas, con lo que el proyecto debería ser votado de nuevo en el Pleno del Congreso; o aprobar el texto en los mismos términos en que le fue remitido, en cuyo caso la ley quedaría ya definitivamente aprobada. Así, la normativa entraría en vigor ya a principios de mayo.

APOYO SOCIALISTA

Sin embargo, hasta el momento de la votación definitiva en el Congreso, los 'populares' tratarán de recuperar el apoyo del PSOE a la Ley, que se deriva de la reforma constitucional pactada por ambos partidos el pasado mes de agosto con el objetivo de introducir un límite de déficit y deuda pública en la Carta Magna.

Los socialistas rechazan el texto redactado por el Gobierno de Mariano Rajoy alegando que se ha incumplido el acuerdo de limitar el déficit público al 0,4 por ciento, ya que en la norma se fija en un cero por ciento excepto para circunstancias excepcionales como catástrofes naturales, así como para reformas estructurales que tengan un impacto presupuestario en varios ejercicios.

Este desacuerdo llevó al PSOE a abstenerse en la votación de totalidad de la reforma celebrada en el Pleno del Congreso el pasado jueves, si bien ya avisó de que podría votar en contra de la aprobación de la norma de no subsanarse estas diferencias, una posición contra la que se manifestó el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que pidió a los socialistas "responsabilidad" ante esta legislación, que servirá para "recuperar la credibilidad" internacional.