El PSOE ha pactado hasta ahora enmiendas por valor de 200 millones de gasto y un recorte de ingresos de 535 millones
MADRID, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los diecisiete ministros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero comparecerán mañana y el miércoles ante el Pleno del Congreso de los Diputados para defender las cuentas de sus respectivos departamentos para el próximo año, en el marco del debate del dictamen sobre el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado para 2010.
Empezando por el titular de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y acabando por el vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, todos ellos presidirán la discusión sobre las cerca de 3.000 enmiendas que la oposición mantiene vivas al proyecto legislativo.
La Comisión de Presupuestos la Cámara Baja dio la semana pasada su visto bueno a las cuentas del Ejecutivo socialista para el próximo ejercicio, tras incorporar alrededor de 170 enmiendas pactadas por el PSOE con el resto de grupos, principalmente de la izquierda parlamentaria de ERC, IU, ICV y BNG, aunque también alcanzaron compromisos con PP y CiU.
Entre ellas destacan el mantenimiento de la deducción de 400 euros para las rentas bajas, la reforma de la conocida como 'Ley Beckham' para elevar la tributación sobre deportistas de élite y otros trabajadores extranjeros con rentas superiores a 600.000 euros y la renovación del Plan 2000E de ayudas a la compra de vehículos a 2010 con un presupuesto de 100 millones de euros.
Asimismo, el PSOE alcanzó un acuerdo con PP y CiU para que Fomento conceda en 2010 préstamos participativos por importe de 250 millones para compensar a las empresas por los sobrecostes generados por las obras adicionales y las modificaciones a los proyectos originales del 'Plan Renove' de autovías de primera generación, lo que permitirá desbloquear la ejecución de la primera fase de este programa.
Sin embargo, esta partida se financiará a través de deuda pública, por lo que no tendrá impacto en el gasto no financiero, cuyo techo se sitúa en 2010 en los 185.249 millones de euros.
En este sentido, el portavoz socialista de Presupuestos, Francisco Fernández Marugán, se muestra convencido de que no se ha producido ningún descuadre en el equilibrio de las cuentas públicas durante la última fase de la negociación, pese a que han pactado partidas por más de doscientos millones de euros, incluyendo el Plan 2000E, a la que se añade una caída de ingresos de 535 millones derivada de los cambios fiscales.
RECURSOS DE PP Y CIU
Precisamente el grupo parlamentario de CiU ha presentado una solicitud de voto particular para tratar de retirar la enmienda pactada por el PSOE con ERC, IU ICV y BNG que mantiene la deducción de 400 euros en el IRPF a rentas con una base imponible de hasta 12.000 euros anuales, ya que consideran que "tendrán que soportarla" comunidades autónomas y ayuntamientos.
En declaraciones a Europa Press, el portavoz económico de CiU, Josep Sánchez Llibre, explicó que el acuerdo contempla que al menos una tercera parte de esta minoración de ingresos se traduzca en una reducción de las entregas a cuentas que reciben los entes territoriales a través del Fondo de Suficiencia y otros mecanismos.
Por su parte, el PP ha remitido un escrito a la Mesa del Congreso que preside José Bono para que pida al Gobierno que "reconsidere" su veto a las enmiendas presentadas por PP, CiU, ERC, IU, ICV y BNG contra la subida del IVA que recogen los Presupuestos Generales del Estado para 2010, que considera una decisión "arbitraria e indiscriminada".
EL PSOE SEGUIRÁ NEGOCIANDO
Aun así, los socialistas no se cierran a prolongar la negociación durante el debate de esta semana, si bien la mayoría absoluta que le garantiza el apoyo de los escaños de PNV y Coalición Canaria, les facilitará el trámite frente a lo vivido en Comisión, en el que los nacionalistas canarios no participaron. Una vez superada la prueba de esta semana su proyecto presupuestario será remitido al Senado, donde las mayorías son diferentes.
De ser rechazado en la Cámara Alta, como ya ocurrió en los dos ejercicios anteriores, obligaría de nuevo al Congreso a salvar el texto elaborado por Salgado mediante el respaldo de una mayoría absoluta de la Cámara, para su consiguiente aprobación definitiva.
Si no hay veto del Senado, una posibilidad que este año queda en manos de ERC, ICV y BNG, ya que es seguro que PP y CiU pedirán la devolución, el texto se seguirá tramitando, lo que abre la puerta la inclusión de enmiendas no deseadas por el Gobierno, aunque los socialistas podrían retirarlas durante la votación definitiva en el Congreso, prevista para el 17 de diciembre.
