BRUSELAS, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Parlamento Europeo ha pedido este miércoles que el futuro presupuesto plurianual de la Unión Europea para a partir de 2021 impulse "nuevos desafíos", como la gestión de los flujos migratorios o la defensa, pero que al mismo tiempo no descuide el apoyo a las regiones más pobres ni los fondos destinados al sector agrícola.
La Eurocámara ha aprobado dos resoluciones de cara al próximo Marco Financiero Plurianual (MFF, por sus siglas en inglés), que cubrirá los años entre 2021 y 2027 y será el primero sin la aportación de Reino Unido. La Comisión Europea presentará su propuesta al respecto a principios de mayo.
Así, los eurodiputados han apostado por que el presupuesto sirva para atender a "nuevos desafíos" a los que se enfrenta la UE, como la gestión de los flujos migratorios, la seguridad, la defensa o el cambio climático.
En este contexto, consideran que el límite de gasto actual debe aumentarse hasta el 1,3% de la renta nacional bruta con el objetivo de responder a estas nuevas necesidades "sin descuidar a las regiones más pobres ni al sector agrícola".
Además, el Parlamento Europeo ha abogado por impulsar los programas de investigación, el programa Erasmus+, la iniciativa para el empleo juvenil y el apoyo a las pymes, así como la inversión en infraestructuras mediante la Facilidad Conectar Europa.
Por otro lado, los eurodiputados han advertido de que no habrá acuerdo sobre el marco financiero 2021-2027 si no hay avances en el capítulo de ingresos. En este ámbito, la Eurocámara propone mantener los recursos propios actuales e introducir otros nuevos gradualmente.
En esta línea, plantea opciones como un IVA revisado, un nuevo impuesto sobre las transacciones financieras, una proporción de los ingresos del impuesto de sociedades un nuevo tributo al sector digital o impuestos medioambientales.
En opinión de los eurodiputados, la nueva estructura de recursos propios debe reducir hasta el 40% la parte procedente de las contribuciones directas de los países y acabar con la lógica de que los Estados miembros deben recibir una cantidad de fondos equivalente a la cantidad aportada, puesto que "conduce a un juego de suma cero".
Asimismo, piden suprimir todos los cheques y correcciones que benefician sólo a algunos socios y cubrir los 10.000 millones de euros que va a dejar de ingresar la UE por el Brexit sin incrementar la carga sobre los contribuyentes.
