Esta iniciativa se enmarca en las actividades desarrolladas dentro de su Sistema de Gestión Medioambiental
VALENCIA, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Valencia cuenta en todas sus instalaciones con buzones en los que sus trabajadores pueden depositar sugerencias encaminadas a aplicar buenas prácticas medioambientales en esta compañía y mejorar las iniciativas emprendidas en este sentido, según informaron a Europa Press fuentes de la empresa.
Estos buzones, de color rojo, se encuentran situados en los talleres centrales y el depósito Norte de la EMT, en el barrio de San Isidro; en el depósito Sur, ubicado en la zona de Los Naranjos, y en la sede de las oficinas centrales, que se encuentran en el casco histórico de la capital.
Esta iniciativa se enmarca en las actividades desarrolladas por la Empresa Municipal de Transportes dentro de su Sistema de Gestión Medioambiental, cuya aplicación recibió en 2005 la certificación, por parte de AENOR, de la norma UNE-EN ISO 14001, destacaron las mismas fuentes.
Asimismo, apuntaron que esta distinción garantiza que la EMT "cumple con su política medioambiental y trabaja en la prevención y la reducción de los residuos que se generan en sus instalaciones técnicas, además de formar e implicar a todo el personal de la empresa en la consecución de dicha norma".
Igualmente, en todas las instalaciones de la Empresa Municipal de Transportes se lleva a cabo la recogida selectiva de residuos (papel, plásticos y residuos orgánicos), resaltaron las mismas fuentes, que también precisaron que en los talleres de la compañía existen zonas específicas para grandes residuos como baterías de los vehículos, ruedas, pilas o aceites usados.
Por otro lado, se cuenta con estructuras para proteger a la población de los impactos acústicos. Éste es el caso del Depósito Norte de autobuses de la empresa, donde se han empleado los últimos avances en materiales especiales para construir uno de sus laterales.
El presidente de la Empresa Municipal de Transportes y concejal de Circulación y Transportes en el Ayuntamiento de Valencia, Alfonso Novo, en este sentido, resaltó, en declaraciones a Europa Press, que ésta es una compañía "comprometida con la conservación del Medio Ambiente". Novo aseveró que así se ha manifestado en aspectos como la obtención y la certificación de la norma medioambiental europea ISO 14001 y en la utilización en la flota de autobuses públicos de combustibles alternativos menos contaminantes.
El edil agregó que se trabaja "en la implantación de los mejores sistemas de calidad en todas las áreas de la empresa, desde la técnica hasta la atención al cliente" con el objetivo de llevar a cabo "un esfuerzo continuo por conseguir un servicio público seguro y respetuoso con el Medio Ambiente, la ciudad y sus habitantes".
AUDITORÍA.
Además, la EMT se somete periódicamente a una auditoría del Sistema de Gestión Medioambiental, adscrito a los procesos de la Norma ISO 14001, que verifica y determina que la gestión medioambiental se ajusta a los criterios marcados y a la aplicación de dicha norma, explicaron las mismas fuentes.
En esta línea, comentaron que la implantación de la norma ISO 14001 de Gestión Medioambiental en la Empresa Municipal de Transportes, además de acreditar que la empresa dispone de una estructura para controlar el impacto ambiental de sus instalaciones, actividades y servicios en el contexto de una ciudad como Valencia, conlleva otras "ventajas".
Entre ellas, destacaron la mejora de la imagen ante la sociedad, los trabajadores y las administraciones públicas al poner de manifiesto controles y supervisiones siguiendo criterios medioambientales establecidos por la norma en sus instalaciones, procesos y productos.
Asimismo, las mismas fuentes apuntaron que estas actuaciones en favor del medio ambiente "previenen la contaminación medioambiental que el servicio de la EMT pueda generar en el entorno ciudadano", además de "orientar hacia la mejora continua y facilitar los canales de comunicación dentro de la empresa incrementando los niveles de información y formación de su plantilla".
La compañía considera que esto demuestra que la empresa "integra la gestión medioambiental en su gestión global" y subraya que con estas medidas se aumenta el control de los procesos de la compañía respecto a consumos y generación de residuos, y se mejora la proyección que se da de esta compañía municipal como "empresa moderna, eficiente y sostenible".
La EMT estima también que someterse a este tipo de indicaciones medioambientales contribuye además a "ordenar y facilitar el cumplimiento de las obligaciones formales y materiales exigidas por la legislación" en esta materia, además de "reducir los riesgos de incumplimiento de la normativa legal y los daños al Medio Ambiente".
Los responsables de la empresa municipal resaltan, por otro lado, que esto ayuda a "optimizar las inversiones y los costes derivados de la implantación de medidas correctoras" y "facilita el acceso a las ayudas económicas de protección medioambiental", al tiempo que "posibilita el desarrollo de tecnologías y productos, la optimización del consumo de energía eléctrica, la regeneración del aceite usado en los autobuses, la depuración de aguas residuales y la reutilización".
