OVIEDO, 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Confederación del Taxi de España (CTE) consideró hoy que, el incremento del IVA desde el 7 por ciento al 8 por ciento en el tipo reducido así como del 16 por ciento al 18 por ciento en el tipo normal, "frenará el consumo de las familias y podría perjudicar no solo la creación de empleo si no también a su mantenimiento".
No obstante --explicó en una nota de prensa el presidente de la CTE, José Artemio Ardura Valdés--, "la difícil situación por la que atraviesa el país hace imprescindible la adopción de medidas y requiere de la solidaridad de todos con los sectores más desfavorecidos de la población así como de una contención en el gasto público por parte del Gobierno Central y el de las distintas Comunidades Autónomas para que estas medidas puedan ser realmente eficaces".
La repercusión que este incremento del IVA tendrá sobre el Sector del Taxi debe de ser valorada desde dos puntos de vista diferentes, según la CTE. Más del 98 por ciento de los profesionales taxistas tributan en el Régimen de Estimación Objetiva por Índices o Módulos, en este caso la repercusión del incremento del IVA apenas tendrá trascendencia alguna siempre que los Índices o Módulos de aplicación al Sector en el año 2010 no sean modificados al alza, cuestión esta que en ningún caso está previsto que ocurra.
Y el 2 por ciento restante que se hayan dados de alta en Estimación Directa sufrirán, a partir del mes de junio de 2010, el incremento de la presión fiscal, en concepto de IVA, en un 1 por ciento si bien el incremento del 2 por ciento en el IVA soportado exigirá un mayor circulante a las empresas pero que no tendrá consecuencia final alguna ya que, en este régimen fiscal, se puede deducir la totalidad de IVA soportado.
En todo caso y puesto que la modificación impositiva entrará en vigor a mitad del año 2010, Ardura Valdés destacó que "parece precipitado" plantear repercusión económica alguna relacionada directamente con esta modificación fiscal, en las tarifas del Sector que serán de aplicación a principios del próximo año 2010, las cuales, a su entender, deberán reflejar los incrementos de costes habidos a lo largo del presente año 2009 y acumular, en todo caso, ese 1% cuya entrada en vigor prevista será en julio de 2010, como un coste añadido que habrá de ser repercutido en las tarifas de 2011.
Por todo ello, la CTE mantendrá su posición de solicitar la disminución de los Módulos Fiscales para 2010 en un 5 por ciento como medida para mantener el empleo y permitir la necesaria liquidez de las empresas ante el alarmante descenso de la demanda de servicio.
