BRUSELAS, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea dio hoy a Rumanía un ultimátum final de un mes, hasta el 16 de diciembre, para que mejore los controles sobre los sistemas de gestión de los pagos agrícolas. De lo contrario, el Ejecutivo amenaza con recortar un 25% estas ayudas.
El Ejecutivo comunitario considera que el Gobierno de Bucarest, desde que recibió la primera advertencia de Bruselas el pasado 10 de octubre, ha realizado "progresos" en la puesta en marcha de los controles necesarios sobre el gasto agrícola.
En concreto, Rumanía ya tiene listo el programa informático necesario para introducir los resultados de los controles sobre el terreno, que ha sido comprobado por un auditor independiente. No obstante, el auditor ha encontrado "importantes deficiencias" en el software necesario para garantizar que los pagos se hagan correctamente.
Por este motivo, la Comisión ha decidido seguir adelante con su amenaza de recortar los pagos en un 25%, que se concretará en una decisión prevista para el 20 de diciembre. No obstante, el próximo 15 de diciembre las autoridades rumanas tienen que dar la acreditación final a la agencia de pagos agrícolas.
Este ejercicio de acreditación cubre las mismas cuestiones que preocupan al Ejecutivo comunitario. Si Rumanía, basándose en un informe independiente, puede probar el 16 de diciembre que los problemas identificados se han resulto, Bruselas paralizará el mecanismo de salvaguardia.
Está previsto que Rumania reciba de la UE 741 millones de euros en 2007 y 1.023 millones en 2008 para desarrollo rural y 443 millones en 2008 para ayudas directas. El recorte del 25% no significa que los agricultores vayan a perder dinero, sino que será el presupuesto nacional rumano el que tenga que poner los fondos que faltan hasta que se resuelvan las lagunas.
