Economía/AVE.- CiU exige a Zapatero que asuma su responsabilidad y pida perdón por la "nefasta gestión"

Actualizado: martes, 23 octubre 2007 15:06

Duran dice que Barcelona ha esperado el AVE 15 años y puede hacerlo "15 días más" y acusa al Gobierno de poner "en peligro vidas humanas"

MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, exigió hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que cuando acuda a la Cámara Baja la próxima semana para dar explicaciones sobre el cierre de varios tramos de Cercanías de Cataluña sea "modesto", asuma personalmente y "en solitario" su "responsabilidad política" en esta cuestión y pida "perdón" por las consecuencias de la "nefasta gestión" que, a su juicio, se ha hecho de las obras del AVE.

En una rueda de prensa en el Congreso, Duran dejó claro que al emplazar a Zapatero a asumir su responsabilidad no estaba pidiendo la dimisión del jefe del Ejecutivo, sino que entone públicamente un 'mea culpa' por la situación que vive estos días la provincia de Barcelona.

Según Duran, Zapatero ya se hizo de facto responsable de todos los problemas que vienen sufriendo las Cercanías de Cataluña en los últimos meses al negarse a cesar a la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, como le reclamaron todo los partidos catalanes, incluidos ERC e IU-ICV, los socios de gobierno del PSC. "No ha querido escuchar a nadie y ahora tiene que asumir la responsabilidad en solitario", apuntó.

Por todo ello, subrayó que, a partir de ahora, CiU se centrará en reclamar que sea el propio Zapatero el que se responsabilice de que esta "situación de gravedad extrema y excepcional" y admita que es consecuencia de sus interés en "ir deprisa" para poder inaugurar el AVE a Barcelona el día 21 de diciembre, como está previsto.

"LA HORA DE LA MINISTRA YA PASÓ".

"Le pedimos que venga en el tono más humilde posible, que venga con la máxima modestia asumiendo su responsabilidad política, porque en una sociedad democrática madura el Gobierno debe asumir responsabilidades políticas y hoy sólo cabe que la asuma el presidente del Gobierno. Él es el responsable. La hora de ministra ya pasó", aseveró Duran.

En este contexto, el también secretario general de CiU puso en duda que, pese a todo, el AVE pueda inaugurarse en la fecha fijada y aconsejó a Zapatero que "no se preocupe" porque los catalanes "ya están acostumbrados" a verle "incumplir" su palabra. De hecho, recordó que el pasado verano el presidente garantizó que los problemas de las cercanías estarían resueltos este otoño y que, ahora, las cosas están aún peor.

En este punto, volvió a acusar a Zapatero de "electoralismo" y, tras recordar que la Alta Velocidad no va a llegar a la frontera francesa en 2009, como se barajaba inicialmente, sino en 2012, aseguró que CiU habría "comprendido" que la inauguración de diciembre se retrasara. "Hemos esperado 15 años a que llegue el AVE y podemos hacerlo 15 años y 15 días", comentó, incidiendo en lo que hay que hacer es primar la seguridad y la continuidad del servicio de Cercanías, que considera "vital".

Además, Duran arremetió contra los socialistas catalanes, de los que dijo, están en "ignorado paradero" y en una actitud de "plena sumisión" al PSOE que les impide "tan siquiera levantar la voz en defensa de los usuarios y los intereses de Cataluña".

NO VALEN EXCUSAS.

Por todo ello, solicitó a Zapatero que cuando protagonice su "forzada" comparecencia en el Pleno la próxima semana, no ponga "excusas" achacando los problemas "a la lluvia, el terreno" o los antiguos responsables políticos y que tampoco cargue contra los profesionales o las empresas encargadas de las obras.

También aprovechó para denunciar que en estas obras "se ha puesto en peligro las vidas de usuarios y operarios" y puso como ejemplo que el pasado fin de semana sólo la "pericia" de un maquinista impidió que se produjera una "catástrofe humana" en una de las líneas que lleva a Hospitalet.

Por último, se quejó de que este tipo de problemas, además del incremento en los "costes" inicialmente previstos por la "mala gestión", dañan la credibilidad de los servicios y las obras públicas.