Economía/Empresas.- El 87% de las empresas consideran una prioridad reducir costes para afrontar la crisis

Actualizado: lunes, 9 marzo 2009 14:15

MADRID, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -

El 87% de las empresas españolas considera una prioridad reducir costes y aumentar la eficiencia de su operativa para hacer frente a la crisis económica, recortes que el 43% de ellas ya está aplicando a todas las áreas de su estructura, según una encuesta de Ernst & Young, realizada por 'The Economist Intelligence Unit' entre ejecutivos de 250 compañías cotizadas.

El 55% de las empresas recorta los gastos por motivos de competitividad, el 50% por pérdida o necesidad de rentabilidad, el 31% debido al incremento en la demanda de inversión, el 31% lo hace debido a la globalización, el 29% porque lo demanda la dirección, el 20% por mejoras en la estructura financiera y el 19% debido al 'outsourcing'.

Entre las principales opciones de reducir costes, el 77% de las empresas manifestaba mejorar sus procesos de negocio y un 60% decidía reducir el coste de las partidas correspondientes a proveedores.

A su vez, el 50% de las compañías estudiadas citan la optimización de sus infraestructuras tecnológicas, mientras que el 47% menciona la reducción de personal.

Por áreas afectadas, el 43% de las empresas ha implantado un programa de reducción de costes que afecta a toda la estructura de la compañía, el 28% ha reducido costes en el área de manufacturing, operaciones y logística, un 29% en el de tecnologías de la información y en compras, un 20% en la venta y distribución, un 19% en recursos humanos, un 18% en tesorería y un 17% en marketing.

A pesar de ello, la experiencia demuestra que el 70% de las empresas fracasa en sus objetivos sólo tres años después de haber anunciado su plan de ahorro. El 63% de las empresas que implantó un programa de reducción de costes logró resultados en el primer año.

Hace unos meses, cuando las empresas cerraban su año fiscal, siete de cada diez empresas afirmaban que habían mejorado sus ingresos totales pero, en cuatro compañías de cada 10, la rentabilidad había empeorado. El 30% percibía que las posibilidades de inversión para la expansión del negocio se habían deteriorado.