MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
Renfe se ha comprometido a abordar con los sindicatos en el "supuesto" de que en el futuro se "plantee la apertura a la participación privada" del capital de alguna de las cuatro sociedades en que la operadora se segregará con el principio del nuevo año.
La "supuesta" privatización parcial de la compañía "en ningún caso será mayoritaria" y "se hará a través de la negociación con los sindicatos".
Así consta en el punto 7 del 'Preacuerdo de Garantías por la Implantación del nuevo modelo societario de Renfe' que la operadora ha suscrito este martes con los tres sindicatos mayoritarios de su comité de empresa (CC.OO., UGT y Semaf).
Las otras dos formaciones sindicales con representación en la compañía, CGT y Sindicato Ferroviario, mantienen su rechazo a la segregación de Renfe. De hecho, vienen desarrollando un calendario de movilizaciones en contra de este proceso que contempla una jornada de huelga para el próximo 20 de diciembre.
El próximo 1 de enero Renfe se convertirá e un 'holding' del que dependerán cuatro sociedades. Tres de ellas canalizarán los actuales negocios (tráfico de viajeros, transporte de mercancías y talleres) y la cuarta se dedicará a alquilar trenes a otros operadores.
El objetivo de la operadora con esta reestructuración es contar con una organización más adecuada para afrontar la apertura a la competencia del transporte de viajeros en AVE prevista para el primer semestre de 2014.
VOCACIÓN DE CARÁCTER PÚBLICO.
Según el preacuerdo rubricado con los sindicatos, al que tuvo acceso Europa Press, "las cuatro nuevas sociedades" en que se dividirá Renfe estarán "inicialmente participadas en su integridad por la entidad pública Renfe, iniciando su actividad con un capital social 100% público y con la vocación de mantener ese carácter público en el desarrollo de sus actividades en el nuevo modelo empresarial".
No obstante, apunta que "en el supuesto de que en un futuro se plantee la apertura a la participación accionarial privada en alguna de las sociedades, que en ningún caso será mayoritaria, se hará a través de la negociación con los representantes legales de los trabajadores".
En este caso, la compañía también garantiza que "en el caso de variación en la participación accionarial, los trabajadores de la sociedad afectada permanecerán en el grupo Renfe".
MOVILIDAD Y ERE'S.
En virtud del acuerdo, las relaciones laborales del nuevo "grupo Renfe" se regirán por los convenios colectivos actualmente vigentes, hasta que se negocie uno nuevo para todo el grupo.
Asimismo, fija condiciones de movilidad y permeabilidad de los trabajadores entre las distintas empresas y garantiza que en caso de que la compañía tenga que plantear expedientes de regulación de empleo (ERE) serán de carácter "voluntario y universales", esto es, que cualquier empleado pueda sumarse al mismo, de forma voluntaria y sin cumplir ningún requisito de edad o antigüedad.
De su lado, los tres sindicatos firmantes destacaron en un comunicado que el preacuerdo contiene puntos que estimaban "esenciales" y "buena parte" de sus pretensiones. En su opinión, "permite abordar la reestructuración de Renfe de forma ordenada, elimina las incertidumbres de los viajeros y garantiza expresamente el mantenimiento de todos los derechos de los empleados y el carácter público de las sociedades".
