LUXEMBRUGO, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, aseguró hoy que España apoya el "contenido" del nuevo reglamento de control que este lunes negocian los ministros europeos en Luxemburgo y que incluye un carné por puntos para los pescadores, pero pedirá a Bruselas "ampliar el plazo" para su entrada en vigor.
La ministra española hizo estas declaraciones minutos antes de mantener una reunión trilateral con la presidencia de turno de la UE, que este semestre ocupa Suecia, y la Comisión Europea para presentar las "preocupaciones" de España.
La presidencia sueca busca el consenso para un reglamento que lleva debatiéndose cerca de un año y que ha sido criticado tanto por parte de los ecologistas, que lo consideran insuficiente, como por la patronal pesquera europea (Europêche), que temía que la reforma se tradujera en una mayor carga burocrática y más costes para los pescadores.
Una de las principales novedades del reglamento es la introducción de un carné por puntos para sancionar las faltas graves de los pescadores. El último borrador que se negocia prevé hasta "cuatro notificaciones" previas a la retirada definitiva de la licencia, que se traducirían en la suspensión del permiso durante dos, cuatro, ocho y doce meses, explicaron fuentes diplomáticas.
El documento que negocian los Veintisiete contempla multas de hasta 300.000 euros por infracciones graves y la reducción o retirada de fondos comunitarios si se demuestra "dejadez" por parte de las autoridades nacionales a la hora de hacer cumplir dicho reglamento. También prevé una regulación de la pesca deportiva y contabilizar este tipo de capturas como parte de las posibilidades de pesca nacionales.
"Nos preocupa sobre todo la entrada en vigor de determinados artículos de ese reglamento, porque supone la transposición de la normativa al Estado y cambios en los comportamientos de Comunidades Autónomas, gobierno y pescadores", explicó Espinosa.
Por esta razón, la delegación española pedirá a Comisión y presidencia "ampliar un poco más los plazos" que se contemplan en el último borrador que se negocia. "Salvo este tema concreto, no tenemos mayores dificultades en cuanto al contenido, porque creemos que es necesario un nuevo reglamento", indicó la ministra.
Bruselas insiste en que es necesaria su entrada en vigor el 1 de enero de 2010, aunque es "receptiva" a retrasar hasta 2011 "algunas disposiciones" como el equipamiento técnico o las sanciones, porque son medidas "costosas", explicaron fuentes diplomáticas europeas.
A juicio de Espinosa, que recordó que la actual normativa tiene "más de 15 años", es necesario "unificar" las sanciones y demás medidas, porque en la actualidad "son diferentes" en cada Estado miembro. "Estamos en un espacio único y si las infracciones son las mismas, las sanciones también han de serlo", añadió la ministra.
