Economía/Finanzas.- El Banco de España detecta un aumento de los activos dudosos por el incremento de los créditos

Actualizado: martes, 22 mayo 2007 17:04

La institución destaca la buena salud de las entidades de depósito, cuyo beneficio aumentó un 33,6% en 2006, hasta 25.717 millones

MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -

Los activos dudosos de las entidades financieras españolas están aumentando tras el fuerte incremento registrado por los créditos en los últimos años y como consecuencia de la aplicación de la nueva normativa contable, según el Informe de Estabilidad Financiera publicado hoy por el Banco de España.

En concreto, los activos dudosos pasaron de crecer al 4,6% en diciembre de 2005 a hacerlo ahora al 9,9%. No obstante, la institución que dirige Miguel Angel Fernández Ordóñez indica que los ratios de morosidad "siguen en niveles muy reducidos, en particular, si se comparan con los de otros sistemas bancarios desarrollados".

"Este incremento de los activos dudosos no se ha trasladado a las ratios de morosidad, que permanecen en niveles mínimos, en parte debido al propio crecimiento de la actividad", subraya el informe.

Esta situación, además, no está afectando a la solvencia de las entidades financieras, que "se mantiene significativamente por encima de los mínimos regulatorios", según el Banco de España.

El crédito al sector privado en España creció en 2006 por encima del 25%, pero con un cierto cambio de patrón al frenarse el ritmo de crecimiento de la financiación a las familias e intensificarse el del crédito a las empresas (+30,3%).

"La financiación a hogares muestra signos de desaceleración en el segundo semestre del año, en particular la financiación para adquisición de vivienda", dice el informe.

En el segmento de crédito a empresa, volvió a acelerarse el destinado a construcción y promoción inmobiliaria, que alcanzó una tasa del 44,8% a finales de 2006, pero también el otorgado al resto de actividades empresariales, con un crecimiento del 18,6%, 8 puntos por encima de la tasa de diciembre de 2005.

"Tanto el crédito a construcción, como, sobre todo, a promoción inmobiliaria siguen crecimiento intensamente (33% y 50%, respectivamente), incluso acelerándose, en la segunda mitad de 2006", señala el informe.

No obstante, el Banco de España considera que esto podría reflejar el inicio por parte de los promotores de nuevos proyectos en 2006, adelantándose a la entrada en vigor de la nueva normativa sobre calidad de la construcción que podría encarecer los costes.

AJUSTE INMOBILIARIO ORDENADO.

El informe resalta que "recientemente se ha comenzado a moderar el dinamismo" de los préstamos hipotecarios, cuya desaceleración está "estrechamente vinculada" a una progresiva normalización de las condiciones en los mercados inmobiliarios.

Esta normalización, según el Banco de España, se refleja tanto en la evolución del precio de la vivienda, cuya tasa de crecimiento interanual mantiene una clara tendencia decreciente desde finales de 2004, como en las variaciones en el número de operaciones hipotecarias vinculadas a la adquisición de inmuebles residenciales.

"Estos cambios refuerzan la verosimilitud de un escenario central en el que los ajustes en este mercado continuarán teniendo lugar de una forma paulatina y ordenada. De este modo, la probabilidad que cabe asignar a escenarios alternativos en los que las correcciones tuvieran lugar de una manera menos ordenada es reducida", asegura el informe.

BUENA SITUACION DE LAS ENTIDADES.

El Banco de España destaca que las entidades de depósito españolas -bancos, cajas y cooperativas- desarrollaron su actividad durante 2006 en un "contexto benigno", que les permitió reforzar su cuenta de resultados y ganaron 25.717 millones de euros en 2006, un 33,6% más que el ejercicio anterior.

En este sentido, asegura que la solidez de los resultados, la elevada rentabilidad, la eficiencia y las buenas expectativas "siguen mostrando una elevada capacidad para generar resultados y recursos propios, y por tanto, para hacer frente a perturbaciones inesperados".

No obstante, el Banco de España advierte que pese a este entorno favorable "conviene evitar la complacencia y seguir vigilando la evolución de los costes, ya que parte de las ganancias de eficiencia obtenidas podrían revertir en una coyuntura menos positiva".