BARCELONA, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los jóvenes ganaderos catalanes pidieron hoy que no se creen "alarmas infundadas" entre la población en relación al protocolo preventivo puesto en marcha por la Generalitat en 48 granjas catalanas con ganado procedente del Reino Unido tras la detección de un brote de fiebre aftosa en dos explotaciones de ese país.
Según el presidente de la asociación de Jóvenes Agricultores y Ganaderos de Cataluña (JARC) en Barcelona, Josep Pinyol, el sector sabe que existe "mucho control" en el tráfico de animales y que todos los que ahora están siendo analizados "llegaron antes de la detección de este foco".
Para JARC, la Generalitat ha actuado "con rapidez y cautela", aunque insistió en que se trata de un problema detectado "en dos explotaciones británicas dentro de un mismo radio" que, además, "se encuentran a más de 5.000 kilómetros de aquí".
Pinyol confió en que no se cree un temor "psicológico" frente a esta enfermedad que "no afecta al consumo de la carne animal puesto que no es contagioso a los humanos", pero quiso incidir en que Cataluña "está a años luz de que pueda suceder algo así".
