MADRID 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno elevará mañana previsiblemente su estimación de crecimiento de la economía española para este año, situada en el 3,3%, y aprobará el cuadro macroeconómico de 2007, que servirá de punto de partida para elaborar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año.
El Consejo de Ministros de mañana, el último antes de las vacaciones de verano, revisará las grandes cifras del cuadro macroecónomico, como suele hacer todos los años por estas fechas. Se prevé que el Gobierno modifique al alza la previsión de crecimiento del PIB para este año en una o dos décimas, hasta alcanzar el 3,4% ó el 3,5%.
Tanto el vicepresidente económico, Pedro Solbes, como el director de la Oficina Económica del presidente del Gobierno, Miguel Sebastián, insinuaron hace unos días que era más probable que la previsión de crecimiento de la economía española se revisara al alza que a la baja, aunque ninguno de los dos precisaron la magnitud de estos cambios.
Los diferentes servicios de estudios de cajas, bancos y otras entidades económicas estiman que el PIB podría crecer este año entre un 3,2% y un 3,6%. A la espera de que el INE publique los datos del segundo trimestre, la economía española ha mostrado en los últimos meses un notable dinamismo. En los últimos tres trimestres (tercer y cuarto trimestre de 2005 y primer trimestre de 2006) el PIB nacional ha crecido a un ritmo del 3,5%.
En cuanto al cuadro macroeconómico del próximo año, que servirá de base para los terceros presupuestos del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, la previsión de crecimiento podría situarse en el entorno del 3,2%.
El titular de Economía y Hacienda informará también de la previsión de su Departamento sobre los principales componentes de la demanda interna, como el consumo de los hogares y de las administraciones públicas, la construcción, la inversión en bienes de equipo, el empleo, y la evolución de exportaciones e importaciones, que apunta a una cierta mejoría.
Lo que no parece que se revisará, al menos de momento, es el objetivo de superávit de las administraciones públicas que el Gobierno se ha propuesto alcanzar este año (0,9% del PIB). Así lo afirmó el pasado martes el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, quien, por otra parte, se mostró convencido de que esta cifra se superará "holgadamente" al final del ejercicio.
PRINCIPALES ORIENTACIONES DE LOS PGE.
Junto con la aprobación del cuadro macroeconómico, Solbes apuntará mañana algunas de las líneas de los Presupuestos Generales del Estado para 2007, si bien las partidas concretas de determinadas materias no se conocerán hasta después del verano, periodo en el que el Gobierno tiene previsto mantener contactos con los Grupos Parlamentarios.
De momento, el Departamento de Pedro Solbes ya ha adelantado que los PGE de 2007 darán prioridad a la I+D+i y a las infraestructuras, de tal forma que los recursos destinados a la investigación civil se incrementarán en más de un 31%, mientras que la inversión en infraestructuras crecerá según el PIB nominal y superará los 13.000 millones de euros.
Además, Solbes ha anunciado que en 2007 se hará un esfuerzo "notable" en política de educación, con un aumento de recursos para la implantación de la Ley Orgánica de Educación, y de las dotaciones para becas.
El vicepresidente económico también ha informado de que las partidas destinadas a Ayuda Oficial al Desarrollo se incrementarán hasta alcanzar el 0,42% del PIB en 2007, en línea con el compromiso del Gobierno de llegar a 0,5% al final de la legislatura.
Asimismo, tras las reuniones informativas que Economía ha mantenido con los agentes sociales y que se retomarán en septiembre, el Ministerio ha confirmado que los PGE del próximo año habilitarán una partida de 400 millones de euros para poner en marcha el sistema nacional de dependencia, y que se elevará en un 15% el presupuesto del Plan Vivienda.
De los PGE para 2007 también se conoce el techo de gasto no financiero que prevé el Ejecutivo y que asciende a 142.925 millones de euros, un 6,7% más que el año anterior. Según Solbes, este límite "garantiza una orientación neutral de la política fiscal" y ayudará a mantener bajo control la inflación y el déficit por cuenta corriente.