LONDRES, 4 Nov. (Reuters/EP) -
El sindicato británico Unite dio hoy la bienvenida a la decisión de General Motors de revocar la venta a Magna de su filial europea Opel (Vauxhall en Reino Unido), al tiempo que instó al Gobierno del país a prestar apoyo financiero a la compañía.
El secretario general de Unite, Tony Woodley, espera que todos los Gobiernos europeos implicados en el caso, incluyendo el británico, aporten fondos para asegurar el mantenimiento del negocio.
Woodley aseguró que un acuerdo con General Motors es mucho mejor que el pacto alcanzado anteriormente con Magna para Reino Unido y para la marca Vauxhall, que cuenta con una plantilla de unos 5.500 empleados y con dos fábricas en Ellesmere Port y Luton.
"Por supuesto, una reestructuración sigue siendo necesaria, pero este es un negocio que sostiene más de 20.000 empleos y 400 empresas de componentes en Reino Unido", añadió el líder sindical, quien espera que General Motors recupere sus planes iniciales para Europa.