Economía/Tabaco.- Imperial sube mañana el precio de marcas y reacciona al alza de impuestos como el resto de tabaqueras

Actualizado: jueves, 11 enero 2007 20:57

MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

Imperial Tobacco subirá mañana, previsiblemente, el precio de algunas de sus marcas de cigarrillos y reaccionará de esta forma a la última alza de impuestos acordada por el Gobierno para atajar la proliferación de las marcas baratas, al igual que el resto de las principales compañías tabaqueras.

Según informaron a Europa Press en fuentes del sector, la multinacional británica aplicará un incremento de 10 céntimos en el precio de la cajetilla de JPS, que desde mañana se comercializará en la red de estancos a 2,20 euros, y encarecerá la de Davidoff Rubio hasta 2,95 euros, frente a los 2,75 euros que costaba.

La última subida de impuestos, la tercera llevada a cabo por el Gobierno a lo largo de 2006, aumentó de 55 a 70 euros por cada mil cigarrillos el nivel mínimo de los impuestos especiales del tabaco de acuerdo a su objetivo de elevar el precio de las marcas más baratas por encima de los dos euros.

La norma provocó una reacción en cadena de las tabaqueras que optaron por trasladar el endurecimiento tributario a los precios de sus marcas, un movimiento comercial que arrancó en 2006 y se ha prolongado durante el mes de enero.

El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha argumentado en reiteradas ocasiones que los aumentos tributarios son la única vía del Ejecutivo para evitar que se extienda el hábito de fumar con las marcas baratas de cigarrillos a las que recurrieron las tabaqueras para contrarrestar los efectos de la Ley Antitabaco.

Según datos del Club de Fumadores por la Tolerancia, los endurecimientos fiscales aplicados por el Gobierno en su lucha contra el tabaquismo han contribuido a que el Estado marque un récord de recaudación por impuestos al tabaco en 2006, con 8.142 millones de euros, lo que supone un 7,6% más frente al año anterior.

Los fumadores españoles pagan cerca del 80% del precio de venta al público de los cigarrillos en impuestos, lo que convierte a este producto en el que mayor fiscalidad soporta. Así, de cada cinco cigarrillos que se fuman, cuatro se pagan a las arcas del Estado.