BARCELONA, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) prevé realizar durante 2007 una "consulta pública" sobre la necesidad de renovar la red de telecomunicaciones española, según anunció hoy el presidente de la CMT, Reinaldo Rodríguez.
Rodríguez explicó hoy en Barcelona que el objetivo de la consulta es "recoger las opiniones de todos los implicados en el sector" para luego "asesorar al gobierno" sobre las actuaciones a seguir.
"La renovación de la red de telecomunicaciones es decisión de los operadores y del Gobierno, el regulador sólo aplica el marco que dicta la Unión Europea", defendió, a la vez que argumentó que "Europa es muy diferente, el café para todos no va a funcionar, la normativa común se debe adaptar a la situación de cada país".
En este sentido, Rodríguez apostó por que la consulta pública sirva para "ver las problemáticas y soluciones de nuestro país en concreto y darlas a conocer a los responsables" políticos.
Respecto a los dictámenes de Bruselas, lamentó que el nuevo marco regulador no estará listo hasta "dentro de tres o cuatro años" y "no podemos esperar tanto tiempo". Según el representante de la CMT, es necesario un marco regulador "que no ponga freno al desarrollo".
INTERVENCIÓN PÚBLICA NECESARIA PERO NO COMPLEMENTARIA
Rodríguez expuso en una conferencia en la escuela de negocios Esade de Barcelona que la mejor regulación es la que aporta un "equilibrio" entre "mantener la tensión de la competencia, es decir, evitar el monopolio, y a la vez dejar libertad para "permitir el desarrollo de los operadores".
Así, calificó la intervención pública como "necesaria pero no complementaria", sino en todo caso "subsidiaria" al mercado. Respecto a la propuesta de la Generalitat de Catalunya de crear un operador de telecomunicaciones neutro, arrastrada desde la pasada legislatura y de momento sin concretar, Rodríguez señaló que "todavía no hay elementos de juicio".
Con todo, expuso que en el caso de desarrollo de redes desde la Administración "me parece perfecto que se instalen redes públicas donde no llega el mercado, pero si hemos apostado por el mercado, hay que respetar las reglas del juego" y no convertir a los poderes públicos en competidores de los operadores privados.
