MADRID, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -
La pérdida de clientes frente a los nuevos competidores y la presión regulatoria son los dos principales riesgos a los que tienen que hacer frente las compañías del sector de las telecomunicaciones en 2009, según un informe de Ernst & Young.
Así, una de las principales preocupaciones del sector es la 'fuga' de clientes en una industria en la que los nuevos competidores --las empresas de Internet, los proveedores de cable y los fabricantes de equipos-- se han convertido en socios y competidores.
"La capacidad de fidelización centrará buena parte de los esfuerzos de las operadoras tradicionales en un mercado donde las compañías de Internet son capaces de ofrecer medios y servicios de comunicación alternativos a los de las 'telecos' tradicionales", explica la compañía en su informe.
En cuanto a la regulación y la normativa referida al sector, Ernst & Young afirma que la incertidumbre sobre la presión regulatoria se mantiene como uno de los riesgos más significativos en una industria caracterizada por una segmentación regida por una jurisdicción determinada para cada ámbito de negocio.
Para los analistas, la legislación puede actuar de "freno" a la hora de desarrollar nuevas infraestructuras o invertir en nuevas tecnologías. "(...) el regulador tiene también potestad de limitar el retorno de la inversión en nuevas tecnologías realizada por la compañía", añadía.
Sobre esta última cuestión, Ernst & Young puntualiza que en el sector existen riesgo de errores en la previsión del retorno de la inversión. En este sentido, los analistas se muestran "especialmente" preocupados por las inversiones a corto plazo relacionadas con el desarrollo de la banda ancha en los móviles, fibra y la introducción de las redes de nueva generación.
NUEVOS MODELOS Y REDUCCIÓN DE COSTES
La compañía de auditoría señala que el "reto" de las empresas del sector para hacer frente a la entrada de nuevos competidores es el de conseguir beneficios con nuevos modelos de negocio. Un ejemplo puesto por los analistas consultados por la firma es el de la distribución de contenido y publicidad a través del móvil.
Ernst & Young explica que a medida que la industria se desarrolla, la implantación de nuevas tecnologías y los cambios en la demanda de los consumidores conducen a las compañías de telecomunicaciones a reevaluar sus modelos negocio para sustituir los procesos y los sistemas de negocio obsoletos.
Asimismo, la compañía recuerda que en la actualidad todas las operadoras, en particular aquellas que proceden de mercados maduros, están priorizando el ahorro de costes como su principal estrategia.
"Para muchos, ésta se ha convertido en la única forma de mejorar la rentabilidad y los márgenes de negocio", explicó.
En concreto, las compañías que ofrecen servicios de alta calidad se están enfrentando a una dura competencia en los países emergentes, donde operan empresas con un modelo de negocio de bajo coste.
FUSIONES Y ACUERDOS ESTRATÉGICOS
Ernst & Young indica que, aunque la crisis crediciticia ha roto la "fusiomanía" en muchos sectores, en la industria de las telecomunicaciones se esperan muchas operaciones de consolidación, lo que supone un "riesgo" y una "oportunidad" a la vez.
"Las adquisiciones aportan a las compañías la oportunidad de crecer, acceder a nuevos mercados o incorporar tecnologías complementarias a su negocio. Pero un fallo en la elección de los candidatos o del proceso de integración podrían conllevar severas repercusiones en la reputación de la compañía y en la marca", resaltó.
En cuanto a la mala gestión de los acuerdos estratégicos, la firma de auditoría manifestó que en los últimos meses se han producido alianzas estratégicas entre operadoras y terceras partes para acceder a nuevas zonas geográficas, compartir redes y desarrollar nuevas soluciones.
Para Ernst & Young, aquellas compañías que no sean capaces de "digerir adecuadamente" estas alianzas están en riesgo de dañar su reputación si entran en conflicto con sus socios. Sin embargo, la firma añadió que aquellas compañías que no se decidan por llegar a acuerdos de este tipo podrían ver disminuir su cuota de mercado.
