MADRID 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
La diputada de IU-ICV en el Congreso Montserrat Muñoz anunció hoy que su grupo exigirá al Gobierno que se pronuncie sobre las "necesidades aeroportuarias" de Madrid y que realice estudios de impacto ambiental "exhaustivos" sobre el impacto del ruido y la contaminación que generaría la construcción de dos nuevos aeropuertos en Madrid.
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, expresó el pasado martes su apoyo a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, para la construcción de dos nuevas instalaciones, una de carga y otra privada, así como de un comité de rutas en el que tengan participación el Estado, la Comunidad de Madrid y otras instituciones como el Ayuntamiento de la capital y la Cámara de Comercio.
En un comunicado, Muñoz explicó que su grupo parlamentario pedirá al Ejecutivo que no declare de interés general el proyecto de construcción de dos nuevos aeropuertos en Madrid, tal como le reclama la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, pues conllevaría un "grave déficit" de participación ciudadana, "así como la eliminación de profundos requisitos de carácter medioambiental, imprescindibles en esta materia".
MOCIÓN DEL CONGRESO.
Muñoz recordó que el Pleno del Congreso de los Diputados aprobó en septiembre, a propuesta del grupo parlamentario de IU-ICV una moción sobre Barajas que implicaba el diseño de nuevas rutas con criterios de mínimo impacto sonoro y medioambiental que podría convertirse en papel mojado con la construcción de dos nuevos aeropuertos en Madrid.
Por este motivo, IU-ICV exigirá a Gobierno que cumpla la moción de septiembre y que, en consecuencia, paralice el comité de rutas para Barajas creado con el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, pues afecta a las competencias de la Comisión de Seguimiento de la ampliación de Barajas, "en la que sí están presentes otros ayuntamientos afectados, además de los propios vecinos".
A juicio de Muñoz, "con estas últimas actuaciones bilaterales" el Ministerio de Fomento "vuelve a las andadas" vulnerando la legislación, los derechos de los ciudadanos y las decisiones del Congreso, "para lo que sí ha considerado conveniente ponerse de acuerdo" con Esperanza Aguirre, "a quien nada le importa el impacto acústico y ambiental" que pueden sufrir miles de madrileños.