El experto Domènec Biosca insiste en Gran Canaria en que "no hay crisis" y "arruinarse es libre, pero caro"

Europa Press Economía Finanzas
Actualizado: viernes, 26 febrero 2010 18:03

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

El profesor Domènec Biosca afirmó hoy en el marco del I Encuentro Regional El Ocio en Canarias, organizado por la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de Las Palmas, que "no hay crisis" y sostiene que "arruinarse es libre, pero carísimo".

Biosca se refería así a la necesidad de reciclarse y adaptarse a las nuevas formas de demanda para garantizarse el éxito en el sector turístico.

En el acto de inauguración estuvieron presentes el vicepresidente y presidente de la Comisión de Turimo, Jaime Bouzón, y la directora general de Consumo del Gobierno de Canarias, Sinesia Medina, informó la Cámara de Las Palmas en un comunicado.

Bouzón expuso que la actual tendencia negativa puede invertirse, pero sólo si la tarea se afronta "de manera colectiva", mientras que Medina descartó que la crisis pueda sortearse "reduciendo la calidad" y recordó el efecto negativo que tiene una mala crítica para los destinos turísticos.

Con ambos coincidió Domènec Biosca durante su exposición, en la que primaron las alusiones a la felicidad del cliente como mejor arma para la fidelización y divulgación de la marca. "Las calles vacías traen camas aburridas", dijo para referirse a la necesidad de crear un entorno de ocio capaz de satisfacer a todo tipo de clientes, porque "si sólo se venden camas, habrá precios de subasta", recalcó.

"NO HAY QUE IR A FITUR"

Ante cerca de un centenar de asistentes, este experto en Turismo recordó que las herramientas para crear la demanda han cambiado, llegando a afirmar que "no hay que ir a Fitur", para a continuación matizarlo al exponer que las relaciones con los medios de comunicación y la presencia en Internet --redes sociales y páginas web-- son en la actualidad elementos fundamentales.

Otro aspecto abordado fue el fin de la calidad como elemento que puede esgrimirse por sí sólo para captar turistas. El ponente señaló que el concepto ha variado sensiblemente y que en la actualidad "la calidad es la talla de cada cliente", en alusión a la necesidad de segmentar el ocio por edades, sexos y cuantas variedades haga falta para que nadie quede descolgado.

Biosca también tuvo palabras para los responsables políticos, a los que recomendó "no gastar más dinero en planes estratégicos" y, junto a los empresarios, recorrer todo el mundo para conocer y extraer lo mejor de cada oferta; pudiendo dar así a cada tipo de cliente "la felicidad que busca".

No dudó en recordar que la satisfacción del cliente debe ser integral y refirió los casos de varios lugares de las islas en los que la oferta de vuelos es escasa y aeropuertos en los que se puede esperar por un taxi durante cerca de dos horas.

Sus consejos alcanzaron también a la implicación de los empleados de los hoteles como agentes de venta. "Al cliente hay que tentarlo", aseguró. Del mismo modo, recomendó a los propietarios y directores de establecimientos hoteleros dotar a sus trabajadores de la formación y motivación necesarias para conseguir de ellos el mejor rendimiento, "siempre con la felicidad de los clientes en el horizonte", sentenció.

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