Gescartera.- Pilar Giménez-Reyna dice que aceptó ser la "mujer objeto" de Camacho, que era "quien hacía y deshacía"

Actualizado: martes, 25 septiembre 2007 17:33

La presidenta de la agencia se negó a contestar a las preguntas de las acusaciones particulares por razones de "salud psicológica"


MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de Gescartera, Pilar Giménez-Reyna, declaró hoy a preguntas del fiscal, Vicente González Mota, que aceptó ser la "mujer objeto" de Antonio Camacho en el momento que le nombraron presidenta de la agencia de valores. "Lo acepté pero le dije que no quería poderes ni firmas", explicó la imputada quien, declaró que accedió dada la "insistencia" de Camacho y a pesar de que no tenía "ni preparación, ni ambición, ni interés".

La presidenta de Gescartera explicó que era Camacho era quien "hacía y deshacía" dentro de la entidad y que ella "siempre" confió en él. "Hasta el día de la intervención nunca pensé que estaba en una cueva de ladrones", afirmó.

La imputada explicó que el 14 de junio de 2001, día de la intervención de la CNMV, acudió al organismo regulador, donde se le mostraron los certificados falsos y le preguntaron por el paradero del dinero. "Miré a Camacho y le pregunté que dónde estaba el dinero", explicó. El propietario de Gescartera le contestó diciendo que "era un error" y que no se pusiera "histérica".

La confianza de Giménez-Reyna aumentó con la incorporación a la plantilla de los ex empleados de la CNMV José María Ruiz de la Serna y Salvador Alcaraz, ya que hasta ese momento si no estaban Camacho o Francisco Javier Sierra de la Flor en las oficinas "no se firmaba nada".

CLIENTES ESPECIALES.

La imputada explicó que Camacho se hacía cargo de los clientes "especiales", llamados "clientes 0", y que eran captados por él mismo, por sus amistades personales y por la "gente de AGP". Estos clientes no tenían "patrimonio", lo que dio lugar a una lista de inversores sin saldo.

Giménez-Reyna confirmó la existencia de las operaciones "intra-día" en las que se retiraba "en efectivo" parte del saldo de los clientes para disminuir su cartera y favorecer sus declaraciones fiscales.

La presidenta de Gescartera explicó que siempre creyó que el dinero estaba depositado en la sociedad Martin Investments, domiciliada en Delaware (Estados Unidos). El día después de la intervención, mientras ella presentaba su dimisión ante el consejo de administración, Camacho se fue a la CNMV a "enseñar dónde estaba el dinero", explicó.

"Nunca me dijeron que era un préstamo", apuntó. Días después de la intervención presentó la documentación de sus inversiones a su abogado, Agustín Tornos, y que fue éste quien le comunicó que dichos certificados eran falsos. "Nunca he engañado a nadie", concluyó.

Giménez-Reyna continuará contestando a las preguntas de su abogado tras negarse a contestar a los letrados de las acusaciones particulares por motivos de "salud psicológica". La Fiscalía le imputa presuntos delitos de apropiación indebida y falsedad documental por los que pide para ella ocho años de prisión.